El impacto de la vacunación, sobre el cual el país alcanzó el 70% de sus habitantes con esquema completo, y el buen momento epidemiológico han permitido ir reduciendo la cantidad de casos graves que requieren hospitalización, lo que también se ha reflejado en las muertes. Durante el último mes, la cantidad semanal de fallecidos disminuyó a la mitad, pasando de más de 550 cada siete días a 264, y con una tendencia que sigue a la baja.