La serie de elecciones que se han desarrollado entre el 2020 y este año, que han incluido definiciones de gobernadores, convencionales, alcaldes y presidenciales, han dejado un sabor agridulce entre quienes defienden el legado de la ex Mandataria y actual alta comisionada para los DD.HH. de la ONU, Michelle Bachelet.
Mientras en la carrera presidencial la principal carta del bacheletismo, Paula Narváez (PS), quedó en el camino, lo cual se sumó la renuncia de Heraldo Muñoz (PPD) y Ximena Rincón (DC) a sus aspiraciones, en otras áreas como en las gobernaciones o incluso en las próximas parlamentaras aún apuestan a mantener influencia.
La derrota de la abanderada socialista significó en términos formales
el principal golpe al legado de la ex jefa de Estado, considerando que ella misma le dio el impulso inicial a su candidatura. Y pese a que al inicio el respaldo de Bachelet le dio cierto brío a la campaña de la ex vocera de Gobierno, finalmente no pudo remontar en las encuestas.
Lo mismo ocurrió con Muñoz y Rincón, quienes pese a ser figuras destacadas durante su segundo mandato, no entusiasmaron a la ciudadanía. Mientras el primero declinó su candidatura en favor de Narváez, pese a derrotar en primarias a otra figura del sector como Francisco Vidal, la segunda fue desplazada por otra ex ministra: Yasna Provoste (DC).
Más atrás quedaron el líder del PR, Carlos Maldonado, quien fue titular de Justicia de Bachelet en su primer gobierno, y si se revisa más atrás en el tiempo hubo otro ex secretario de Estado que en algún momento pensó en asumir una candidatura y que finalmente no prosperó, el ex titular de Energía, Máximo Pacheco (PS).
Otro ejemplo del repliegue de figuras bacheletistas es el fracaso de la postulación al Senado del ex ministro del Interior, Rodrigo Peñailillo, y los problemas judiciales que enfrenta la ex ministra de Justicia, Javiera Blanco, quienes llegaron a ser estrechos colaboradores de la ex gobernante.
Sin embargo, no todo es pérdida para los seguidores de la ex Presidenta, ya que Provoste tiene a otro ex ministro estrella de la Nueva Mayoría como uno de los coordinadores de su campaña. Se trata del ex titular de Medio Ambiente, Marcelo Mena, quien tras apoyar a Muñoz pasó a respaldar a la demócrata cristiana.
Desde las gobernaciones y Apruebo Dignidad
Pese a que las posibilidades de que los planteamientos que Bachelet impulsó durante sus dos periodos presidenciales permeen en un próximo gobierno ahora son menores, igual hay otros espacios en los que sus seguidores buscarán seguir teniendo influencia para mantener en pie su legado.
Sin ir más allá, Paulina Vodanovic, directora de Horizonte Ciudadano -la fundación que la ex Mandataria creó cuando dejó el poder en 2018- y una de las principales defensoras del bacheletismo, es la apuesta del PS para disputar un escaño del Senado por la Región Metropolitana.
En la misma senda, y aunque su partido separó aguas con la centroizquierda, la ex ministra de la Mujer y Equidad de Género de Bachelet e impulsora de uno de sus proyectos emblemáticos como la despenalización del aborto, la comunista
Claudia Pascual, también competirá por llegar a la Cámara Alta en la misma zona.
Una situación similar se observa con el ex ministro Secretario General de Gobierno, Marcelo Diaz, quien aspira al Senado en Coquimbo por el Frente Amplio, al igual que Miguel Concha, ex asesor de prensa en el segundo mandato y que busca un cupo en la Cámara de Diputados por RD. También está el caso de la ex subsecretaria de DD.HH., Lorena Fries, que competirá en el distrito 10.
Asimismo, en regiones también hay posibilidades de seguir sembrando, según señalan fuentes del sector. ahí destacan los triunfos obtenidos en gobernadores de los ex intendentes Miguel Vargas (Atacama), Claudio Orrego (Metropolitana), Pablo Silva (O’Higgins), Rodrigo Díaz (Biobío) y Jorge Flies (Magallanes).
A ellos se suma la ex gobernadora provincial, Cristina Bravo, que ganó en el Maule, el ex director provincial del Serviu, Oscar Crisóstomo, que triunfó en Ñuble. En el mundo bacheletista también mencionan la llegada de la ex subsecretaria de Economía, Natalia Piergentilli a la presidencia del PPD como otra posibilidad para levantar banderas.
"La Presidenta siempre ha tenido dentro de sus prioridades dar cabida a nuevos liderazgos y empujar una renovación".
Xavier Altamirano, director ejecutivo Horizonte Ciudadano
En la Convención Constitucional, en tanto, la ex secretaria ejecutiva del Consejo Nacional de la Infancia y amiga intima de Bachelet,
Estela Ortiz, acudió a realizar una preentación a la comisión de DD.HH. del órgano, lo cual se suma al trabajo de insumos que ha realizado Horizonte Ciudadano.
Al respecto, el director ejecutivo de la entidad, Xavier Altamirano, comentó a Emol que pese a las derrotas en las presidenciales, "el bacheletismo tiene muchas expresiones, presentes de distintas maneras, desde el proceso constituyente, los avances para alcanzar la paridad de género, la renovación de liderazgos, la ambición medioambiental".
"En cada una de estas posibilidades está presente el bacheletismo, que encarna la capacidad de leer los desafíos actuales y la voluntad política para hacer los cambios", añadió, junto con subrayar que "la Presidenta siempre ha tenido dentro de sus prioridades dar cabida a nuevos liderazgos y empujar una renovación".
En esa línea, recalcó que "no es casual que ella haya puesto fin al binominal, ni que haya empujado la formación de nuevos líderes cuando los partidos tradicionales estaban fallando en dar espacio a los nuevos talentos", advirtiendo además que la fundación seguirá jugando un rol en ese sentido.
Para Altamirano, el principal foco de interés de la entidad "son los nuevos gobiernos regionales y los gobiernos locales porque tenemos la convicción que la revitalización de la democracia y del proyecto progresista pasa por una mirada territorial. Si queremos participación incidente, rendición de cuentas, innovación en las prácticas políticas, debemos partir desde abajo, desde los territorios".
