La semana pasada, un grupo de al menos dos decenas de constituyentes llegaron al Palacio de La Moneda para exigir al Presidente Sebastián Piñera el fin del estado de excepción.
Pero este fin de semana, la consulta en La Araucanía para conocer qué pensaba la ciudadanía sobre renovar o no esa medida logró la participación de 144.994 personas y 118.258 votaron a favor de mantener esta medida.
En ese contexto, algunos representantes de la Convención Constitucional cuestionaron el porcentaje de participación con respecto al padrón total; las condiciones de acceso a la votación; y la falta de difusión del proceso.
La principal crítica a la consulta fue la representatividad, dado que logró cerca del 17% de la participación del padrón total. "Esta no es una consulta representativa, no fue informada, la gran mayoría de las comunidades en el Wallmapu no tienen acceso a internet, entonces no cumple los estándares mínimos para ser vinculante", afirmó la convencional del Distrito 23 Manuela Royo (MSC).
El convencional Manuel Woldarsky (ex Pueblo Constituyente), directamente afirmó que el Parlamento debiera desechar los resultados. "
No debería considerarlos el Congreso, el porcentaje de votantes no es mayor al 16%. Mi opinión sobre terminar con el estado de excepción no ha variado: mientras existan zonas militarizadas, existirán abusos".
Esa misma línea siguió Patricia Politzer (INN), quien también en su red social afirmó que "para no confundirse con los resultados en la Araucanía. En una de las regiones más pobres se realiza una consulta por Internet. Votó un 16% del electorado. ¿Se podrá concluir que la mayoría quiere seguir con el estado de excepción?".
"La consulta de ayer tuvo dos problemas: uno es la falta de conexión a internet de amplios sectores [...] En segundo lugar, no hubo información ni debate sobre las alternativas que se podían plantear. Espero que sigamos teniendo consultas, pero de manera adecuada", reflexionó el representante de la misma zona, Eduardo Castillo (Colectivo del Apruebo).
En tanto, la representante del pueblo mapuche en la Convención, Natividad Llanquileo, fue una de las más críticas del proceso. "No se puede legitimar violaciones a DD.HH. Deber de autoridades es buscar soluciones y mecanismos de salida a problemas. No pueden seguir mismas prácticas fracasadas para más crisis y manipulación conflictos de fondo", publicó en su Twitter.
"Respetar la voluntad popular"
No obstante, otros constituyentes de la zona -principalmente los representantes de la derecha- defendieron los resultados y argumentaron a favor de mantener el estado de excepción.
"Hay que respetar siempre la voluntad popular. Acá las expectativas eran que votaran 90 mil personas, votaron casi 150 mil [...] la opinión que se manifestó ahí es la opinión que existe en La Araucanía. La gente quiere vivir en paz, en tranquilidad, en armonía", opinó el exintendente y constituyente Luis Mayol (Independientes RN Evópoli).
En tanto, la representante de Chile Libre, Ruth Hurtado, emplazó directamente a la presidenta de la Convención, Elisa Loncon, que la semana pasada pidió a los parlamentarios terminar con el estado de excepción en la zona.
"Hoy hablaron los ciudadanos en #ConsultaAraucanía la petición es clara: Paz y Seguridad. Espero que la presidenta @ElisaLoncon escuche lo que piden en la región y pida a los violentos que se bajen las armas", tuiteó Hurtado.
Otra lectura en esa línea apunta a que la consulta "muestra un sentimiento propio de la región", según declaró Helmuth Martínez (Ex LLDP), constituyente del Distrito 23.
Sin embargo, Martínez agregó que “no podemos tener un estado permanente de excepción. Si las personas piensan que ello es la solución de momento, yo puedo respetar y entender eso, pero claramente no será la solución al clima de violencia existente”.
Asimismo, el constituyente Fuad Chahin (Colectivo del Apruebo) hizo un llamado a Loncon y a los escaños reservados a cobrar un rol en la salida de la crisis.
"La legitimidad que tiene la presidenta de nuestra Convención y quienes resultaron elegidos por los escaños es enorme para hacer este llamado al término del estado de excepción, pero también al cese inmediato de la violencia en la Región de La Araucanía", declaró Chahin.
De acuerdo con Chahin, una acción así serviría para "canalizar desde la Convención el diálogo político que nos conduzca a un nuevo trato entre el Estado de Chile y nuestras primeras naciones".
