En medio de su viaje a su natal Punta Arenas, el Presidente electo,
Gabriel Boric, se refirió a la conversación que mantuvo ayer con la timonel del PPD,
Natalia Piergentilli, con quien abordó la conformación del nuevo gabinete.
Según dijo, "tuvimos una buena conversación", la que será reforzada con una reunión presencial que sostendrán durante los próximos días, al igual como ocurrió con el presidente del PS, Álvaro Elizalde.
"Ella lo que dice es que la relación entre nosotros está muy bien, y lo que ella decía es que sería un desaire si no nos juntamos. Pero yo le dije ayer que nos vamos a juntar, le pedí que establecieran las conversaciones y pudiéramos avanzar con los equipos que están en Santiago hoy día. Pero yo me voy a juntar con ella la próxima semana", afirmó Boric en un punto de prensa.
El próximo Mandatario explicó que durante el diálogo con Piergientilli "todo fue aclarado y sentí de parte de ella la mejor disposición de colaboración con los tremendos desafíos que tenemos como país".
"Así que más allá de las siglas de los partidos veo a Natalia y a la gente del PPD tremendamente dispuesta a colaborar desde el espacio que sea más conveniente", subrayó.
Por su parte, el jefe político de Boric, Giorgio Jackson, anunció desde Santiago que también habrá reuniones con los representantes del Partido Radical (PR) y del Partido Liberal (PL) a fin de recibir mayores sugerencias y propuestas para el gabinete.
"Vamos a tener esas conversaciones pronto estos días. Vamos a tener reuniones presenciales tanto con el Partido Radical como con el Partido Liberal y el Partido Por la Democracia. Así que esas conversaciones van a existir. Esperamos que sean reuniones fructíferas, al menos la predisposición de todas las partes es que así sea, entendiendo que provenimos de coaliciones distintas pero puede que nos animen objetivos comunes como las reformas que hemos planteado en el programa de gobierno", afirmó.
Sobre las características que deben tener los integrantes del futuro equipo de Boric, Jackson aseguró que "deben ser capaz de llevar adelante le programa de gobierno y por otro lado que sean capaz de conversar con las distintas partes para conseguir esos acuerdos, que para nosotros es fundamental".
"También la legitimidad de la sociedad civil. Es decir no basta con que solamente estén de acuerdo con lo que queremos proponer, sino que también en la sociedad civil, con las exigencias que se han puesto tanto en materia de sus competencias como en materias que puedan ser escándalos en la sociedad civil o materias legales pendientes, y un montón de otras cosas que se tienen que revisar para que las personas que asuman ese desafío de empujar un programa como el que estamos proponiendo, que es tan ambicioso, tengan esa legitimidad y no estén haciendo ruido por otras cosas que no tengan que ver con el contenido de esas reformas", apuntó.
