Definir un sistema político, tipo de Congreso y si Chile será un país plurinacional. Esas son algunas, pero posiblemente las más importantes tareas que tiene la comisión de Sistema político de la Convención, que ya realizó su primera ronda de votaciones en general.
Hasta ahora, algunas definiciones cuentan con una amplia mayoría y probablemente tendrán los dos tercios de los votos en el pleno —como es el caso de la iniciativa que plantea que Chile es un Estado plurinacional y multicultural—, pero otras levantaron dudas sobre la capacidad de alcanzar acuerdos amplios entre los distintos colectivos.
Sin ir más lejos, generó preocupación por lo reñida de la votación la definición de si se establecerá un Congreso bicameral o uno unicameral.
Y es que si bien se aprobó en general la segunda opción,
logró solo 13 de 25 votos, el mínimo para ser aprobada en la comisión.
Votaron a favor del Congreso unicameral los convencionales miembros de Pueblo Constituyente, Movimientos Sociales Constituyentes, Chile Digno, el Frente Amplio y escaños reservados. Por su parte, los constituyentes de Independientes No Neutrales (INN) se abstuvieron y la UDI, Ind.-RN-Evópoli, el Colectivo del Apruebo y el Colectivo Socialista lo rechazaron.
No es la única comisión donde se observa falta de acuerdos amplios. En la de Sistemas de justicia, una de las normas presentadas durante la semana pasada busca limitar el período de los ministros de la Corte Suprema a entre 10 y 15 años, y el de los ministros de las cortes de Apelaciones a ocho. "Es una mala idea", dijo Fernando Atria (Frente Amplio), el pasado miércoles, en CNN.
Son varios quienes han mostrado disconformidad sobre cómo se está llevando adelante el trabajo de la Convención. "Nadie dijo que sería fácil y recién comienza lo más arduo. Son muchos quienes nos están mirando con grandes esperanzas y debemos hacer hasta lo imposible por no defraudarlos. Nos la jugaremos por demostrar que la democracia cuesta, pero vale la pena", decía Patricio Fernández (Colectivo Socialista) en Twitter.
Difíciles dos tercios
El escenario para llegar a acuerdos y así alcanzar los dos tercios de los votos necesarios para aprobar las normas en el pleno se ve difícil en materias clave.
El año pasado, el Colectivo Socialista, INN y el Frente Amplio evidenciaban una alianza al votar los reglamentos, pero ahora, estos últimos se han inclinado por estrechar lazos con sus compañeros en el pacto de gobierno Apruebo Dignidad (Chile Digno, integrado por el PC y FRVS) y con Mov. Sociales Constituyentes. De esto han acusado recibo sus pares socialistas.
Ahora, en la
comisión de Sistema político, los convencionales tienen la oportunidad de presentar indicaciones para la discusión en particular. Inicialmente, el plazo para hacerlo terminaba hoy, pero entendiendo que este miércoles se dio cuenta en el pleno de nuevas iniciativas que deben ser discutidas en general en la instancia —como la propuesta ciudadana que propone un Congreso bicameral— y que tampoco hay acuerdo entre los convencionales sobre qué tipo de Congreso plantearán al pleno, es que se prorrogó el plazo para presentar indicaciones hasta el próximo miércoles.
Varios constituyentes habían dicho que harían un trabajo "prelegislativo"para alcanzar consensos, pero hasta el cierre de esta edición entre quienes impulsan una y otra postura —de Congreso bicameral o unicameral— no había quién cediera.
El problema es que, divididos como están, ninguna de las propuestas que lleven al pleno —ya sea si en la votación en particular se mantiene el Congreso unicameral o se modificara hacia uno bicameral—, alcanzaría el quorum requerido.
Esto último es visto como un riesgo por parte de algunos convencionales, ya que, de no llegar a los dos tercios de los votos, el Reglamento General establece que la norma será devuelta a la comisión para que una nueva propuesta sea votada en el pleno. Si esta no lograra el quorum de dos tercios, "se entenderá definitivamente rechazada".
Nada escrito en piedra
Entre los constituyentes hay críticas de lado y lado y también llamados al diálogo. Rosa Catrileo (mapuche), coordinadora de la comisión y uno de los 13 votos a favor de la propuesta de Congreso unicameral, dice que "nada de las decisiones están escritas en piedra (...). No estamos casados con el unicameralismo".
Catrileo plantea que lo que han conversado entre representantes de pueblos originarios es que "nos preocupa que funcione el sistema” y que “nos den puntos de acceso (a representantes de pueblos originarios) para la toma de decisiones en ambas cámaras".
Marcos Barraza (Chile Digno) es de los que defiende que debe haber un Parlamento unicameral, para tener un "Congreso más eficiente, más efectivo, sin contrapesos al interior entre dos cámaras, y en definitiva, legisle con mejor calidad, pero especialmente con mejor velocidad".
Al otro lado de la vereda, Maximiliano Hurtado (Colectivo Socialista) considera que "la lógica del Senado tal como existe hoy en día se va a acabar, pero eso no significa que renunciemos a la posibilidad de tener una segunda instancia y a una mirada regional". Esta visión es compartida por Hernán Larraín (Ind.-RN-Evópoli), quien postula que "
el unicameralismo lo que hace es concentrar el poder en las zonas de mayor densidad urbana".
En ambos casos, al igual que en el Colectivo del Apruebo, buscan que se apruebe un Congreso bicameral, pero con modificaciones respecto del actual, donde ambas cámaras tengan facultades distintas.
Desde la UDI, Constanza Hube agrega que "transitar hacia un unicameralismo presentaría un serio riesgo de concentración de poder". El resultado de las negociaciones entre los colectivos está por verse.
Hasta el cierre de esta edición, los convencionales probicameralismo insistían en que, a través de indicaciones se tiene que revertir la votación en general que dejó, hasta el momento, una propuesta de Congreso unicameral.
