Actualmente un 45,6% de las atenciones en los servicios de urgencia pediátricos corresponden a consultas por síntomas respiratorios y la gran parte de ellas se debe al virus sincicial que afecta mayoritariamente a niños en edad preescolar.
Del total de infantes -de uno a cuatro años de edad- que padece patologías asociadas a la contingencia invernal, más de la mitad se debe a este virus,
cifra que supera el 70% cuando se trata de menores de doce meses.
La jefa de la Unidad de Paciente Crítico Pediátrico del Hospital Clínico Félix Bulnes, doctora Marta Zamora, explica que esto se debe a que estos pacientes han tenido poco contacto con los agentes virales, lo que no les ha permitido crear la inmunidad suficiente para enfrentarlos.
Lo anterior, sumado al período de confinamiento experimentado durante los últimos dos años debido a la pandemia de covid-19 en que los niños casi no tuvieron contacto con el exterior y prácticamente no circularon otros virus respiratorios.
Con todo, los síntomas de esta enfermedad varían de acuerdo a la edad del paciente por lo que la doctora recalca que "es importante conocer los detalles que nos permitan detectarla para saber ante cuáles señales de alerta debo consultar con un especialista".
En el caso de los menores de 3 meses, "podemos tener sólo decaimiento, rechazo alimentario y tos y lo más probable es que se trate de una infección por virus sincicial".
En cuanto a los menores de 1 año, la doctora afirma que se puede presentar "decaimiento, irritabilidad, rechazo de la alimentación, secreción nasal, tos, ruidos en el pecho y fiebre".
Los niños y niñas mayores de 1 año, por su parte, pueden presentar "estornudos, fiebre, tos, asociado o no a ruidos bronquiales, pudiendo agregarse dificultad para respirar".
Conductas preventivas clave
En tanto, para evitar contraer este virus hay tres conductas claves se deben evitar a toda costa. En primer lugar, los cambios de temperatura; especialmente no exponerse al frío, dado que altera epitelios celulares de la nariz que son nuestros mecanismos de defensa para evitar la entrada de microorganismos, por lo que modificarlos permite la proliferación y diseminación de éstos, provocando la enfermedad con la aparición de síntomas respiratorios.
En segundo lugar, evitar aglomeraciones. Esto es, no visitar espacios cerrados dada la alta circulación de virus existente.
Y por último, evitar el contacto con personas que están con síntomas respiratorios, lo que también incluye evitar visitas, sobre todo a menores de 3 meses. En este punto, la doctora recuerda que "existe un período de incubación en que aún no se presentan síntomas o se puede portar el agente infeccioso, estar asintomático y contagiar de igual manera".
Asimismo, suma otras medidas preventivas que se deben mantener de forma permanente: ventilar todas las habitaciones diariamente; taparse la boca y la nariz al toser y estornudar y hacerlo con el antebrazo o codo, evitando siempre usar la mano, ya que la contaminamos y seguimos tocando cosas con lo que lo único que logramos es seguir propagando la infección.
Además recomienda el uso de pañuelos desechables, los que deben ser desechados inmediatamente después de su uso; lavado de manos frecuente para evitar la transmisión del virus; y la vacunación contra el covid-19 desde los 3 años y contra la influenza desde los 6 meses para evitar las infecciones severas al menos por estos virus.
