Cerca de las 12:50 horas de este domingo llegó a Santiago el Presidente Gabriel Boric, luego de completar casi 25 horas de vuelo desde Bangkok, Tailandia, donde participó en la Cumbre de Líderes del Foro de Cooperación Económica del Asia Pacífico (APEC).
En su debut en la instancia, el Mandatario tuvo una intensa agenda de actividades que le dejaron poco espacio para abordar temas locales, como la próxima nominación del Fiscal Nacional, por lo que ese asunto será una prioridad para él en las próximas horas.
Desde el Gobierno aseguran el jefe de Estado no ha revisado aún en detalle los últimos movimientos que se han dado en torno a ese asunto, por lo que se espera que tras su arribo se ponga en contacto con la ministra de Justicia, Marcela Ríos, para zanjarlo.
No obstante, fuentes de La Moneda sostienen que
el gobernante no ha vetado a ninguno de los postulantes al cargo, desmintiendo tajantemente un posible rechazo a Ángel Valencia de parte de la ministra de la Mujer, Antonia Orellana.
Asimismo, Boric ha transmitido que está consciente de la dificultad que posee su administración para conseguir los dos tercios que necesita el Gobierno en el Senado para aprobar a la carta que será escogida y anunciada en las próximas horas por el Ejecutivo.
Encuentro con Xi y Harris
La dificultad del Presidente para revisar ese y otros asuntos nacionales se explica por la gran cantidad de reuniones que sostuvo en Bangkok. Entre jueves y viernes, sumó casi una quincena de citas vinculadas a la cumbre y con jefes de Estado y de Gobierno.
La más destacada de ellas fue la que tuvo con el líder de China, Xi Jinping, en la que fue invitado a visitar Beijing en 2023. Según fuentes de cancillería, la fecha está en evaluación, considerando la gira europea que lo llevará a Francia y España.
Más allá de los aspectos de fondo de la reunión, en la que Chile se comprometió a apoyar el ingreso de China al TPP, entre otros asuntos, en la delegación nacional hubo una serie de aspectos que llamaron la atención sobre la performance china.
De partida, que el líder asiático no habla otro idioma que no sea el chino, ya sea por gesto político o comodidad, por lo que apenas conoció a Boric, solicitó de inmediato un traductor para facilitar un diálogo que en ambos países fue calificada como exitoso.
Otro hecho que provocó comentarios fue la escasa presencia femenina en el equipo de Xi, ya que de la decena de asesores que participaron en la bilateral había solo una mujer, lo que marcó un contraste con el del Chile.
También destacaron las especiales medidas chinas concretar el encuentro, como la obligación de que los chilenos tuvieran PCR negativos a horas de la cita y que la silla de Xi y la de Boric fueran más altas que el resto de los participantes, entre otras.
En línea con el mensaje que entregó al iniciar su gira, de tomar distancia de la guerra comercial de China y EE.UU., el Presidente también tuvo espacio para tener un diálogo informal con la vicepresidenta norteamericana, Kamala Harris.
Si bien la conversación no se dio en los términos como la que tuvo con Xi, desde el Ejecutivo subrayaron que pudieron intercambiar posiciones sobre diversos puntos. Lo mismo hizo la canciller Antonia Urrejola, quien habló con la encargada de comercio.
Escorpión y Gabriela Mistral
Más distendido fue el reencuentro que tuvo con el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, con quien tuvo una bilateral oficial, un encuentro informal al que se sumó la líder de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern, y luego en la cena oficial de APEC.
En esa instancia, Boric se sentó al lado del canadiense y también de su par de Francia, Emmanuel Macron, repitiendo una escena que se había visto en la Asamblea General de Naciones Unidas en septiembre y que confirma la afinidad que existe entre los tres.
Durante la ceremonia desarrollada en el Salón de Convenciones de la Real Armada Tailandesa, presenciaron un show en el que cantantes locales interpretaron canciones populares de Louis Armstrong y el clásico bolero "Bésame mucho, entre otras.
También hubo un espacio cultural, en el que aparecieron bailarines, dragones y se utilizaron recursos audiovisuales que entretuvieron a los líderes presentes, ubicados en una amplia mesa principal, secundados en otras mesas por ministros y subsecretarios.
Durante su visita, el Presidente tuvo poco tiempo para otras actividades. No obstante, igual pudo ir a un mercado donde probó pulpo y escorpión, el cual le agradó bastante, según comentaron en su entorno. Además, vio cómo cocinaban cocodrilo.
En medio de sus actividades oficiales, también recorrió las instalaciones de la Universidad Chulalongkorn y algunos de los principales templos budistas de la capital tailandesa, como Wat Pho y el Golden Mount.
También pudo degustar comida thai, tanto en el desarrollo de la cumbre, como en la cena a la que invitó a los empresarios chilenos que formaron parte de la delegación, con quienes compartió en la noche del viernes en el restaurant Blue Elephant.
¿Regalos? Aparte de los que recibió oficialmente, como una cerámica tradicional en Chulalongkorn, se llevó con especial cariño desde esa casa de estudios las ediciones de Gabriela Mistral, Pablo Neruda e Isabel Allende traducidos al tailandés.
En la escala rumbo a Chile, la cual se extendió por casi dos horas en la ciudad de Auckland en Nueva Zelanda, se vio al Mandatario recorrer el aeropuerto vestido con un polerón de Nirvana. Ahí, recibió un poemario de Mistral traducido en maorí e inglés.
