Aún no ha ingresado al Congreso la reforma constitucional que habilitará el proceso constituyente y ya hay dirigentes que están hablando de hacerle modificaciones. Esta tarde lo anunciaron la directiva y parlamentarias de Comunes, partido que firmó el documento, y que acusó que hay "excesivos elementos de tutelaje" en las condiciones de funcionamiento del proceso.
En esto coincidió la senadora Alejandra Sepúlveda (FRVS), que planteó a Emol que "uno pensaba que los expertos iban a ser personas que entregaran su opinión y colaboraran, pero esto incluso de que exista la posibilidad de una mixta si no hay acuerdo es un tutelaje excesivo. Ahora, nosotros firmamos el acuerdo, vamos a respetarlo, pero si existe la posibilidad de hacer las modificaciones, sin duda estamos abiertos a eso".
El diputado y jefe de bancada del PC,
Boris Barrera, defendió la posibilidad de hacerle ajustes a la reforma y descartó que se trate de un "desmarque".
"Entre más podamos avanzar en que este proceso sea lo más democrático posible, todo es bienvenido. Si dentro del proceso hay espacio para eso, hay que hacerlo, hay que intentar ganar la mayor cantidad de espacio que busque que esto sea democrático y con mucha participación ciudadana", aseveró Barrera.
El senador y presidente de RD, Juan Ignacio Latorre, contestó que tampoco cree que sea un desmarque, pero que "otra cosa es que tengan el legítimo interés de mejorar aspectos que no están del todo cerrados en el acuerdo con indicaciones, pero que no se aparten de la estructura central del acuerdo porque por algo lo firmamos ciertas fuerzas políticas y otras no".
Quien evaluó negativamente la postura de Comunes, dentro del oficialismo, fue el senador Juan Luis Castro (PS), que criticó que no existe la suficiente "templanza" para asumir que son un partido oficialista.
"Siento pesar de que haya parlamentarios de un partido de Gobierno que concurrieron al acuerdo, que al igual que el PS y muchos otros, que ya empiecen a desmarcarse y empiecen a hablar de críticas de distinto tipo sin la templanza suficiente para asumir que son un partido de gobierno. No se puede estar en la calle y en el gobierno al mismo tiempo, no se puede ser disidente y oficialista a la vez", dijo Castro.
La negativa de la oposición: el acuerdo es el acuerdo
Desde la oposición manifestaron una postura contraria a hacerle modificaciones a las bases sentadas en el acuerdo, a excepción de detalles que no están incluidos y deben contemplarse, como la remuneración de los expertos.
"Se han visto algunas declaraciones de dirigentes de la izquierda señalando que le quieren introducir cambios al acuerdo. Queremos ser tajantes en que el acuerdo que se alcanzó el lunes es un acuerdo completo, al que no se le pueden hacer innovaciones. Hay aspectos como el tiempo, algunas características que van a tener los expertos, que pueden ser sujeto de discusión legislativa", señaló el senador y presidente de la UDI, Javier Macaya.
Su par de RN, Francisco Chahuán, destacó que el consenso "cumple con los cuatro elementos que nosotros señalamos que eran vitales: amplia participación ciudadana, validación democrática, expertise de los especialistas, un rol del Congreso. Los votos están comprometidos para ese acuerdo, no para algo distinto".
En tanto, el diputado y jefe de bancada de la DC, Eric Aedo, opinó que "no es una buena señal, es una señal de que aún no asumen una realidad evidente a partir del 4 de septiembre: los sectores del Gobierno fueron derrotados en el Plebiscito".
"Acá no hay tutelaje, acá lo que hay es hacerse cargo de una inmensa mayoría que rechazó un texto constitucional. Es más, nosotros, la DC, presionamos hasta el último minuto para lograr un acuerdo y que el oficialismo bajara el tutelaje que quería en este acuerdo, que es que las normas constitucionales se escribieran con 2/3. La actitud que tenían de exigir 2/3 era la misma que tenía la UDI el 15N de tener un poder de veto", criticó Aedo.
