Una vez que se reactivó la discusión y votación en particular de la reforma previsional, la comisión de Trabajo de la Cámara de Diputados se volvió un ring de pelea.
A un lado se sientan los los diputados oficialistas - Daniela Cicardini (PS), Luis Cuello (PC), Andrés Giordano (IND-FA), Diego Ibáñez (CS) y Maite Orsini (RD) - y al otro los parlamentarios de oposición - Cristián Labbé, Henry Leal (ambos UDI), Eduardo Durán, Ximena Ossandón y Frank Sauerbaum (Los tres RN).
Al medio - en sillas más cerca de los oficialistas - se ubica Héctor Ulloa (IND-PPD) y Alberto Undurraga (DC).
El encargado de liderar y guiar la discusión es el diputado Juan Santana (PS), en total hay seis votos de Gobierno y cinco de Chile Vamos. Mientras que Ulloa y Undurraga aportan ideas juntos y votan en bloque, por lo que se han vuelto las piezas claves para alcanzar mayoría.
Las críticas a la conducción de Santana surgieron cuando convocó a votar el proyecto en particular a comienzos de julio. En ese momento comenzaron a surgir presiones para que el diputado diera un paso al costado. "Fuimos sometidos a una votación antojadiza", reprochó Labbé (UDI).
En esa instancia, los parlamentarios se pronunciaron respecto a "normas espejo" y modificaciones al lenguaje inclusivo, pero no contó con el respaldo la oposición. Ante esta negativa, de forma transversal, le solicitaron al presidente de la comisión suspender la votación para transparentar las posturas y organizar el cronograma de trabajo, pero Santana lo descartó.
Incluso la ministra del Trabajo, Jeannette Jara se sumó a la idea de interrumpir la sesión, pero tampoco fue oída por el diputado.
Las críticas se pausaron porque se conformó una mesa técnica paralela para avanzar en las indicaciones del proyecto y el Ejecutivo no renovó la urgencia, por lo que dejó de estar en tabla por un par de semanas.
Se reactivan los cuestionamientos
La semana pasada se retomó el debate, fue el turno de la Asociación de AFPs exponer ante la comisión y se reactivaron los cuestionamientos a Santana.
"Nos invitaron recién ayer, por lo que intentamos prepararnos lo mejor posible" dijo Paulina Yazigi, presidenta de la Asociación de AFPs. Inmediatamente los parlamentarios de oposición comenzaron a manifestar su incorfomidad por la poca anticipación con la que se convocó al gremio.
Más allá de este caso, a juicio del diputado Henry Leal la presidencia de Santana ha sido "poco tolerante, poco dialogante y que no lleva adelante procesos de acuerdo". Agregó que "trata de imponer su visión a veces con una actitud bastante dictatorial".
"Trata de imponer su visión a veces con una actitud bastante dictatorial"
Diputado Henry Leal (UDI)
En ese sentido la comparó con lo que fue la presidenta de Alberto Undurraga, que para él fue una persona "muy convocante". Leal sotuvo que Santana "no le ha hecho bien a la comision, pero es una decisión política del Gobierno, tendrán que evaluar cómo lo hace, pero no es convocante ni dialogante". Además, advirtió que "es una molestia para muchos diputados".
En medio de la críticas contra Santana algunos parlamentarios de Chile Vamos han apuntado que sería bueno para el futuro de la reforma que Ulloa tome la conducción de la comisión, pero esto no sería tan fácil.
Es que el liderazgo de Santana está sujeto al acuerdo administrativo que pactó el oficialismo con la Democracia Cristiana y otras fuerzas políticas no alineadas. Desde Chile Vamos saben que Undurraga (DC) no presionará ni dará su voto para hacer cambios porque de eso depende la estabilidad de Ricardo Cifuentes (DC) en la presidencia de la Cámara de Diputados.
De hecho, la instrucción entre los diputados DC es no provocar ningún alboroto que pueda poner en un escenario complejo a Cifuentes. Por lo que la buena o mala evaluación que tenga Santana pasaría a un segundo plano. Nuevamente la responsabilidad de que Santana se mantenga a la cabeza de la comisión estaría en manos del Gobierno.
Incluso hay voces al interior de la comisión de Trabajo que han destacado el liderazgo de Andrés Giordano, quien según sus pares tuvo un buen desempeño en la comisión investigadora por los hechos ocurridos en la empresa Kayser. En esa instancia, a pesar de la polarización, Giordano logró aprobar las conclusiones y recomendaciones de forma unánime, con votos desde el Partido Republicano al Comunista.
Por su parte, Giordano no se refirió a él como una posible carta para liderar la comisión de Trabajo y respaldó "absolutamente la gestión que ha tenido Juan Santana hasta el momento". A su juicio "le ha tocado un momento muy convulso, pero también hay que preguntarse quiénes son los parlamentarios que han manifestado molestia, y son parlamentarios de oposición que son absolutamente beligerantes la mayor parte del tiempo y han tenido una postura bastante obstruccionista".
Además destacó que la presidencia de Santana "es parte de un acuerdo administrativo que tiene que llevarse a cabo" y reiteró que "hasta el momento nos parece que la gestión ha permitido ir resolviendo ciertos nudos, quizás al principio hubo más controversias de las que tenemos ahora, pero no me parece una situación crítica que merezca evaluar una reestructuración de la mesa y particularmente de su conducción en la comisión".
La postura de Juan Santana (PS)
Este es el segundo período como parlamentario de Santana y ya se había desempañado como presidente de la comisión de Educación antes. Según él, a pesar de las dificultades, se siente "suficientemente preparado para llevar un debate como este".
Antes de asumir esta responsabilidad él sabía que se enfrentaría a un ambiente polarizado y que "sin duda no sería fácil". "Este clima crispado (...) no es sólo en pensiones, si no que en un sinnúmero de discusiones que se están dando en el parlamento y en las sesiones de la Sala", sostuvo el diputado socialista.
A su juicio "muchas de las críticas que se hacen a la reforma y el tono que se utiliza, particularmente por parte de parlamentarios de la UDI, develan que o no han leído la reforma o tienen un problema de comprensión lectora. Naturalmente eso es una limitación".
Respecto a las críticas en su contra dijo a Emol que "me preocuparía si existieran críticas por parte del oficialismo, pero no es tal, y me siento muy respaldo por mis colegas".
Además explicó que "cada vez que se han realizado críticas he manifestado que existen vías legales para hacer cambios en la presidencia, que es la censura, pero hasta el momento no se ha presentado", aunque sabe que no estarían los votos para que prospere.
