Esta semana arranca en el Congreso Nacional la tramitación del veto que el pasado viernes el Gobierno presentó a la Ley de Usurpaciones. La discusión arrancará en la Comisión de Seguridad del Senado, cuya titularidad está en manos del senador de Evópoli, Felipe Kast.
Es él quien podrá solicitar pronunciarse acerca de la calificación de cada veto -vale decir, si es que su contenido corresponde a uno del tipo aditivo, supresivo o sustitutivo- antes de poner en votación de la Comisión el fondo de cada observación del Ejecutivo.
Cabe destacar que para Usurpación, el Gobierno mandó 14 observaciones al proyecto, que contemplan cuatro vetos aditivos, cinco supresivos y cinco sustitutivos.
¿Cómo se tramita?
El proceso de discusión de un veto está regulado por la Constitución y en la Ley Orgánica Constitucional del Congreso. Este debe pasar por comisión para luego ser sometido a la sala. Si todas las observaciones son aprobadas en el hemiciclo, se despacha al Presidente para la promulgación de la Ley con los cambios incorporados.
Ahora bien, si uno o más vetos son rechazados, se puede insistir en el texto original con 2/3 de los votos. Si aun así se desecha la observación, no habrá Ley en la materia objetada, siempre que se traten de los vetos supresivos y sustitutivos.
De tal manera, en el Congreso relevan el contenido de los vetos aditivos, dado que, si son rechazados, lo que cabría es mantener el artículo original. Entre las adiciones del Gobierno, está la propuesta de dar la opción de pena de 61 días o multa, frente a lo que el Ejecutivo ha calificado como "usurpación pacífica". De no prosperar, se mantendrá el presidio de hasta tres años, planteado en el texto original.
Parlamentarios clave
En el caso de la comisión de Seguridad del Senado, la oposición corre con ventaja. Tres de sus cinco integrantes pertenecen -o integran las bancadas- de Chile Vamos: Su presidente, Felipe Kast (Evópoli); Manuel José Ossandón (RN) y Alejandro Kusanovic (Ind-RN).
El oficialismo cuenta con la senadora y presidenta del partido Socialista, Paulina Vodanovic y el senador de la Democracia Cristiana, Iván Flores, quien ya ha advertido en radio Pauta que "ni con la postura de la derecha dura, ni de la izquierda dura vamos a llegar a ninguna parte (...) Prefiero buscar el sentido común".
A su vez, la timonel del PS ha adherido al término de "usurpaciones pacíficas" que ha acuñado el Gobierno.
"Hay usurpaciones violentas y otras no violentas. Las violentas obviamente exigen que se actúen contra las personas y las no violentas pueden ser el ingreso a un predio, por ejemplo, que no tiene alambres -estamos pensando en un predio rural- que está demarcado o que ni siquiera está demarcado y se tome. Esa es una usurpación no violenta, porque no ha ejercido la violencia", explicó en Mesa Central de Canal 13.
Y añadió que "el otro caso es una usurpación donde hay violencia contra las personas. Entonces, lo que pasa en esta Ley, es que tanto la usurpación violenta, cómo la no violenta, ha quedado con la misma pena y eso es una cosa muy poco común y de verdad que hay que mejorarlo".
Adelantando el tenor del debate, el líder de la Comisión de Seguridad del Senado, Felipe Kast, criticó en La Tercera que "una vez más el Presidente Boric junto a la ministra Tohá se ponen del lado de los delincuentes (...) Ellos quisieron pasar la máquina, la aplanadora y desnaturalizaron el corazón del proyecto, entonces claramente no se podría buscar un acuerdo".
A juicio del parlamentario, el veto presidencial "marca un antes y un después en las discusiones que voy a tener yo en la Comisión de Seguridad del Senado con el Gobierno".
"Claramente el ánimo después de la decisión de ellos no es el mismo", añadió, respecto a la agenda de seguridad que se está avanzando en el Congreso.