Una nueva gira internacional alista el Presidente Gabriel Boric para este lunes 22 de abril. En esta oportunidad, el Mandatario encabezará una visita de Estado a Brasil, acompañado de una amplia delegación de políticos y gremios empresariales, todos con el norte puesto en seguir profundizando la diversificación económica del país.
Un objetivo, por el que si bien se trabaja hace años,
hoy guarda mayor sentido con la guerra arancelaria desatada por el Presidente de Estados Unidos, Donald Trump. La incertidumbre que el Mandatario estadounidense ha generado sobre los productos chilenos, y la afectación a potencias influyentes en la economía nacional como es China, refuerza la necesidad de dispersar las inversiones y adquirir mayor autonomía.
Del mismo modo, ahondar lazos comerciales con Brasil no es baladí para Chile. El gigante latinoamericano es el primer socio del país en la región y el tercero a nivel global. Las inversiones de Chile en ese extenso territorio alcanzan los 19 mil millones de dólares y se ven buenas oportunidades de ampliar esas cifras, considerando además la afinidad que Boric tiene con Luiz Inácio Lula da Silva.
Más de un gesto de simpatía ha tenido Lula con el Mandatario chileno. Le extendió una invitación a la cumbre G-20 en la visita de Estado que el Presidente brasileño hizo a Chile en agosto del 2024. En el periplo de Lula a Santiago se suscribieron 19 acuerdos entre ambos países en temas como agricultura, salud, ciencia, comercio, ciberseguridad y lucha contra el hambre. Asimismo, se espera que en el viaje de Boric a Brasilia se suscriban varios más.
Por otro lado, así como el Presidente chileno, el Mandatario de Brasil ha hecho críticas abiertas a Trump por el alza arancelaria. "Se cree capaz de dictar reglas para todo lo que pasa en el mundo", fustigó hace una semana, en un evento de la industria de la construcción en Brasil. En este contexto, Lula ha buscado robustecer el bloque del Mercosur, urgiendo a Japón zanjar una asociación económica ante la política proteccionista de Trump.
También es conocida la aspiración del Presidente brasileño de unificar a los líderes progresistas. Así fue como convocó a la cumbre "En defensa de la democracia; lucha contra el extremismo", a la que concurrió Boric en el marco de la asamblea general de la ONU el 2024. La iniciativa se replicó de manera telemática el 26 de febrero de este año, con la participación de Boric, Lula, Pedro Sánchez (España), Gustavo Petro (Colombia) y Yamandú Orsi (Uruguay).
Por todo lo anterior es que el nuevo cara a cara con Lula representa para el Mandatario chileno algo más que ahondar en diversificación económica, sino también hacer un frente común ante la guerra arancelaria.
En conversación con Radio Cooperativa, el ministro de Relaciones Exteriores, Alberto Van Klaveren, asumió que la pasada visita de Estado a India y ahora la de Brasil tienen relación con la amenaza de Trump. "Sí, absolutamente. Ahora, son viajes que estaban previstos desde antes", acotó, sosteniendo de todas formas que "se realizan en un contexto que es sumamente apropiado. Porque a nosotros lo que más nos interesa también es poder diversificar nuestras relaciones económicas y en general nuestras relaciones políticas. Eso nos hace menos vulnerables, nos hace más autónomos".
En ese sentido, relevó que "Brasil es un mercado fundamental para nosotros. Es el mercado más importante de América Latina, una economía mayor, una economía que crece a una tasa respetable, y creo que hay muchas posibilidades también, no solamente desde el punto de vista comercial, sino también desde el punto de vista de la atracción de inversiones".
El Canciller también fue requerido respecto a si se extraña una coordinación regional para abordar la guerra comercial, ante lo que reconoció: "Lo echamos de menos, pero es un hecho de la realidad, creo que hay que asumirlo. Cada país tiene una relación propia, sobre todo con sus grandes socios, especialmente en el caso de Estados Unidos. Eso siempre ha sucedido, no han habido periodos muy distintos, sobre todo en lo que respecta a una concertación frente a terceros países, terceros socios".
Esto, a su juicio, "está más acentuado todavía. La región está fragmentada, pero creemos que, pese a esa realidad, obviamente se puede avanzar con países como Brasil".
"Tenemos una relación muy positiva con Perú en materia económica. Con Argentina también tenemos una relación económica que se ha ido consolidando, incluso con un componente energético relevante, y así sucesivamente. En el caso de Brasil tenemos coincidencias importantes y creo que van a poder también profundizarse con motivo del viaje", cerró.