Revelaciones voluntarias de la vida privada, bailes, declaraciones tajantes en materia económica o en torno al conflicto mapuche; los precandidatos del oficialismo han desplegado una artillería de estrategias por estas últimas semanas que han logrado acaparar la atención de la opinión pública.
Y es que de cara a las primarias, los candidatos han intentado explotar sus fortalezas pero también crear unas nuevas. Tal fue el caso de la candidata del PL, PR y PPD, Carolina Tohá, quien el sábado dijo en entrevista con La Tercera que hace un tiempo es pareja con el ministro de Hacienda, Mario Marcel.
La "revelación", de acuerdo a expertos, no tiene nada de casual, sino que sería parte de una estrategia para poder abrir un atisbo de "humanización", y de paso, cercanía con el votante, de parte de una figura que no destaca principalmente por su carisma.
Hay otros casos, como el de la exministra del Trabajo y candidata del PC, Jeannette Jara, que han explotado su perfil más cercano, no sólo amparada por los avances que logró capitalizar como ministra, y que continúa destacando en entrevistas y discursos, sino también buscando mostrar una parte lúdica. Aunque aún estaba en el cargo, la promulgación de la Reforma de Pensiones, que tuvo lugar el 20 de marzo en Peñalolén, puso a Jara como protagonista, y gran parte de la conversación posterior se dio en torno a su animado baile, que a varios les evocó los pasos de la ex Presidenta Michelle Bachelet.
Eso sí, Jara ha intentado ir un paso más allá y ha conseguido generar debate tras señalar en Vía X que no le agrada el acuerdo Codelco-SQM por el litio, y que de ser presidenta, "haría una empresa nacional del litio" y "eliminaría a SQM".
En tanto, el fin de semana, Jara dijo a Mesa Central de Tele13 que quiere terminar con las AFP, "no porque me caigan mal las AFP, no por un capricho, sino porque no solucionan el problema de las pensiones y no tienen nada que hacer en un sistema de seguridad social basado en derechos y operan como empresas que vendieran cualquier bien o servicio. Esto no es el mercado de las papas, es el futuro de las pensiones. Y eso es lo que hay que cambiar".
Por su parte, el candidato del Frente Amplio, Gonzalo Winter, ha apostado por hablar de "continuidad" del actual Gobierno, y también ha expresado su opinión en debates como el que abrió la semana pasada el lonko de Temucuicui, Víctor Queipul, quien se jactó de impedir el ingreso del Estado a las comunidades mapuche de Ercilla.
El parlamentario sostuvo, en conversación con Radio Universo, que no comparte la postura del lonko y que "el Estado de Chile debe imponerse", pero por otro lado destacó que existe una "deuda" muy específica "de tierras que les fueron robadas y que no tiene nada que ver con la comisión de delitos porque cuando yo sea presidente, la comisión de delitos se va a perseguir como comisión de delitos. Y se va a hacer cumplir la Constitución a las leyes".
Sobre aquello, agregó que "otra cosa es que en paralelo avancemos en devolver las tierras que han sido robadas y también, a mi juicio que sería algo importante, en el establecimiento de determinados lugares que sean territorio en donde los mapuche puedan ejercer ciertos grados de autonomía para preservar su cultura, su lengua, etc.".
La mixtura de dichos e incluso mediáticas performance de parte de los precandidatos del oficialismo abre las dudas en torno a los efectos que podría tener en la primaria, que es con voto voluntario. ¿Es posible que puedan convocar a más votantes del sector? ¿hay un efecto real en la ciudadanía de cara a esta primera 'valla' en las urnas?
Un efecto de la "fragmentación"
La cantidad de candidatos es, en el fondo, directamente proporcional a la necesidad que existirá de diferenciarse del otro, mas aún si aquello se pone en el plano de las primarias del oficialismo. Eso lleva a que comiencen a surgir este tipo de elementos más alejados de lo programático y surjan "otras estrategias más superficiales, de anécdotas o detalles personales que no se esperaría que estuvieran presentes en las campañas".
Así lo plantea
Kenneth Bunker, académico y doctor en ciencia política, quien añade lo esperable es que las campañas electorales sean programáticas y sobre ideas de fondo de largo plazo "y no estas cosas que son básicamente inútiles para definir la dirección del país o informar a los votantes. O sea, la vía personal es una cosa, puede ayudar, pero no debiese ser el centro. Y en este ciclo electoral parece ser precisamente lo que está pasando".
A su juicio, esto tiene que ver con la fragmentación excesiva. "Creo que cuando hay demasiados partidos políticos, se diluye el poder de cada uno y se incrementa la búsqueda de cada uno de los actores de tratar de diferenciarse, y esa lucha, muchas veces termina banalizando el proceso institucional y se empieza a dar este tipo de fenómenos que estamos viendo ahora". Incluso, apunta a que "es difícil pensar que se pueda revertir a una canalización del debate más normal, mientras siga existiendo una politización crispada".
Con todo, los expertos coinciden en que toda acción que tomen las candidaturas de cara a las primarias "son relevantes", y no se descarta que se intensifiquen en el tiempo. Tomás Duval, académico de la U. Autónoma, comenta que, justamente porque las primarias tienen voto voluntario, "todos saben que sus resultados dependerán de la capacidad de movilización y convocatoria que tengan, más allá de los apoyos partidistas".
"El desafío que tienen es protagonizar la contienda electoral y mostrar las diferencias, de ahí que algunas recurran a formas y contenidos diversos, unos apelando a emociones y otros a temas específicos que los caracterizan como fuerzas políticas", subrayó.
El riesgo: alejar a los moderados
En la línea de la fragmentación, las estrategias mediáticas de Tohá, Winter y Jara apuntan a nichos específicos, lo que a juicio de Miguel Ángel Fernández, subdirector académico de Faro UDD, finalmente revitalizan la movilización que llevó el Presidente Gabriel Boric a La Moneda y motiva a los adherentes ideológicos para las primarias del próximo junio.
"Estas tácticas podrían impulsar la votación de chilenos cercanos al Gobierno de Boric, pero corren el riesgo de alejar a moderados y no identificados con el sector, lo que podría costar reputación y convocatoria en la primera vuelta".
Miguel Ángel Fernández, Faro UDD
"Tohá busca generar empatía y cercanía, alejándose de la imagen gubernamental; Winter levanta las banderas radicales del Frente Amplio original, intentando reencantar al público joven base del éxito de 2021; Jara mezcla carisma con propuestas ancladas en las ideas de izquierda, como eliminar las AFP, fiel al Partido Comunista", subraya.
Sin embargo, advierte que "estas tácticas podrían impulsar la votación de chilenos cercanos al Gobierno de Boric, pero corren el riesgo de alejar a moderados y no identificados con el sector, lo que podría costar reputación y convocatoria en la primera vuelta", subrayó.
En la misma línea, Germán Silva, analista político de la U. Mayor, destaca que "los cuatro candidatos a la primaria del oficialismo deben apelar en esta primera etapa a motivar a sus públicos más afines, hablarle a su votante duro, para entusiasmarlos con una primaria que la verdad será muy competitiva". Por ejemplo, Jara con el relato de que eliminaría las AFP, "busca reencantar a sectores de su propio partido y la izquierda más dura que se sintieron defraudados y que aspiran a un cambio más profundo del sistema".
En el caso de Tohá, remarca que si bien su relación con Marcel "era un secreto a voces", pero quedan dudas de si su intención de develarla "fue por un tema de transparencia y evitar que alguien se le adelantara, o simplemente porque Marcel es militante del PS y ahora necesita cuadrar a ese partido tras su candidatura".
