Ministro de Seguriad, Luis Cordero.
Aton
Al menos cuatro aspectos han sido considerados esenciales por parlamentarios del Partido Comunista y el Frente Amplio para aprobar el proyecto que establece las reglas sobre el uso de la fuerza por parte de las policías y las Fuerzas Armadas, el cual será sometido a votación este lunes.
Cuestionan que hayan quedado fuera del proyecto el principio de proporcionalidad, la prohibición de disparar desde la cintura hacia arriba y la prohibición de utilizar la fuerza una vez que una persona ha sido detenida. Asimismo, rechazan que se haya delegado a un reglamento la facultad de ampliar el abanico de armas que pueden utilizar los Carabineros.
Ante la falta de respaldo por parte de los parlamentarios oficialistas a la iniciativa impulsada por el Ejecutivo, el ministro de Seguridad, Luis Cordero, informó la semana pasada que se retiró la urgencia del proyecto. Además, con el acuerdo de los comités parlamentarios, se decidió postergar la votación para el día lunes, la cual estaba inicialmente prevista para el miércoles pasado.
Los legisladores oficialistas exigieron al secretario de Estado diseñar una estrategia para enfrentar la votación de manera coordinada como bloque, y que las inquietudes de algunos sectores pudieran ser abordadas en una eventual comisión mixta.
El emplazamiento de los legisladores no fue bien recibido por Cordero, quien incluso se vio obligado a ofrecer disculpas públicas luego de acusar una "encerrona" por parte de los diputados durante la votación del proyecto en la Comisión de Seguridad de la Cámara, instancia en la que se registraron 10 abstenciones y un voto en contra.
En dicha sesión, parlamentarios del Socialismo Democrático, el Frente Amplio y el Partido Comunista criticaron la falta de diálogo político-legislativo para abordar adecuadamente la tramitación del proyecto.
Sin duda, uno de los principales intereses del Partido Comunista y el Frente Amplio es que se establezca el principio de proporcionalidad. Ante esta solicitud, Cordero respondió el miércoles pasado que el principio "no fue aprobado ni en la Cámara ni en el Senado. Por lo tanto no hay posibilidad mixta".
No obstante, argumentó que "este proyecto de ley, aunque no se refiera explícitamente a proporcionalidad, es evidente que la regula".
El tono del secretario de Estado cambió desde ese miércoles, jornada en la que posteriormente reconoció haber estado molesto. Tras ofrecer disculpas públicas, también señaló que en los días siguientes estaría disponible para resolver las "dudas legítimas" de los parlamentarios respecto del proyecto.
