Un debate, o al menos confusión, ha existido en torno a una arista del
caso licencias médicas. Y es que si bien se han anunciado sumarios en contra de quienes viajaron al extranjero estando con permiso de salud -lo que implica un incumplimiento del período de reposo prescrito-,
muchos han renunciado en el camino.
Y ¿qué ocurre si ya se inició el sumario y la persona deja su cargo? O ¿qué sucede si se aceptó su salida, pero no se inició la investigación? Desde el Gobierno entregaron una mirada, mientras que abogados también detallaron cuáles son los procesos y qué pasa en cada caso.
Hay que mencionar que esta semana, los diputados de Renovación Nacional (RN) Miguel Mellado y Carla Morales, enviaron un oficio a la contralora Dorothy Pérez a propósito de esto. La idea, según precisaron, es que se instruya a todos los órganos del Estado que "retenga las renuncias", para evitar la "impunidad administrativa".
Si bien, mencionaron que las renuncias pudiesen ser vistas "como un acto de reconocimiento o de justicia", suponen "una salida que permite evadir procedimientos sumariales y las consecuencias que supone una sanción, que llegan incluso a la inhabilitación para ejercer cargos públicos".
Este sábado, la vocera (s) de Gobierno, Aisén Etcheverry, remarcó a T13 Finde que "todos los casos tienen que ser objeto de un sumario, y es por eso que la primera instrucción fue que todos los servicios que tenían casos identificados, si es que ya no habían iniciado sumario, porque muchos habían iniciado incluso antes del informe de la Contraloría, tenían que iniciar el sumario. Y respecto de los funcionarios que son de carrera, ese proceso de investigación tiene que seguir su debido proceso, se tienen que hacer las investigaciones y aplicar las sanciones".
En cuanto a "funcionarios de confianza, de nombramientos, de autoridades", afirmó que "la renuncia se está pidiendo inmediatamente. Es decir, se inicia el sumario y se acepta la renuncia".
Aisén reconoció que "ha habido mucha discusión" y ha escuchado la idea de que lo anterior "sería como una forma de hacerle el quite a la responsabilidad". Sin embargo, aseveró que "la verdad es que no".
"Cuando se inicia el sumario, independiente del si el funcionario renuncia o no renuncia, el sumario sigue su curso y las sanciones se aplican, y esas sanciones quedan en la hoja de vida de esa persona, para que la próxima vez que quiera ingresar al sector público, esté ahí", puntualizó.
Ahora, Francisco Narváez Gallo, abogado y académico de la Facultad de Derecho de la Universidad de Santiago de Chile, sostuvo a Emol en primer lugar que "todos los funcionarios públicos nos regimos por el principio de probidad, que nos obliga a mantener una conducta intachable, honesta y leal en el ejercicio de la función pública".
Tras ello, precisó que "contra los funcionarios que han sido denunciados por el uso irregular de licencias médicas, lo que corresponde es que se inicie un procedimiento sumario, en el que se buscará determinar si son o no responsables por su actuar".
A eso, Gabriel Celis Danzinger, profesor de Derecho Administrativo de la Universidad de Talca, agregó que "para que se haga la investigación", el funcionario "tiene que estar activo, o sea, no haberse desvinculado". Entonces, "si un funcionario se desvincula antes de que se inicie el sumario, no se puede iniciar el sumario. Si se desvincula después que se inicie el sumario, el sumario continúa y pueden incluso destituirlo".
Por lo tanto, complementó: ¿Puede renunciar el funcionario? Sí, pero la administración le tiene que aceptar la renuncia. Entonces puede revisar si tiene un sumario pendiente y ahí retenerle la renuncia para que le tomen declaración, etc. Pero si, por ejemplo, hoy día fuera un día hábil y presenta la renuncia, y no se le ha iniciado un sumario, al día de hoy que la persona está presentando su renuncia, la administración tiene que verificar que no hay sumario y se la tiene que aceptar".
"Entre comillas, podría iniciarle ese mismo día el sumario. Eso podría ser, pero más que eso ya no. Y por lo tanto, esa es, podríamos decir, la salida que tiene", enfatizó.
Pablo Cifuentes, socio de CBC Abogados, se refirió en la misma línea, pues dijo que "los funcionarios públicos pueden ser sumariados incluso si han renunciado, siempre que el sumario haya sido iniciado formalmente antes de la aceptación de la renuncia. En tal caso, la autoridad puede retener su aceptación por hasta 30 días si los antecedentes dan cuenta de hechos que podrían haber derivado en la destitución. El procedimiento debe continuar hasta su término, y la sanción se anota en la hoja de vida, aun cuando el funcionario ya no esté en funciones".
Distinto es, según explicó, "si la renuncia es aceptada antes de que se dicte la resolución que ordena el sumario: en ese caso, el funcionario no puede ser sumariado, salvo que vuelva a ingresar al servicio público dentro del plazo de prescripción general de cuatro años (o del plazo penal, si los hechos revisten carácter de delito)".
En todo caso, sostuvo que "es importante precisar que la renuncia no extingue la posibilidad de ejercer acciones civiles o penales que pudieran corresponder por los hechos, las cuales son independientes de las consecuencias meramente administrativas".
Una mirada similar mostró la abogada María Soledad Jofré, académica de Derecho del Trabajo y Seguridad Social de la Universidad de Talca, quien aseveró que "la renuncia se presenta por el funcionario y debe ser aceptada por el organismo. Ahí cesa en sus funciones y, por lo tanto, si no se inició sumario, puede renunciar sin problemas".
Ahora, "si presenta la renuncia y ya se inició el sumario, el artículo 141 del Estatuto Administrativo señala que puede retenerte hasta por 30 días, cuando del procedimiento existan antecedentes de que podría haber destitución. Ahora, pasados esos 30 días se tiene que aceptar la renuncia, aunque no se haya resuelto el sumario. Y eventualmente si hay sanción solo podría anotarse en su hoja de vida".
Finalmente, Javiera Delgadillo, jefa de carrera de Administración Pública de la Universidad de O'Higgins (UOH), dijo a este medio que "la responsabilidad administrativa se extingue cuando un funcionario deja de trabajar en el sector público. Sin embargo, no se extingue si el funcionario se cambia de institución, ya que el empleador sigue siendo el mismo, es decir, el Estado".
"En el 'caso licencias médicas', hemos observado que se despide a funcionarios, sean municipales o del gobierno central, lo cual en la mayoría de los casos significa no poder continuar con un proceso disciplinario. A mi juicio, solicitar la renuncia o despedir al funcionario sin una investigación, es una medida cortoplacista y mediática pero que no permite perseguir la responsabilidad, es más, podría llevar a 'salvar' al funcionario de recibir una sanción mayor de acuerdo a lo dispuesto en el Estatuto Administrativo y otras normativas", finalizó.