"A su pregunta de si me di cuenta de haber colisionado a una reja o atropellado a una persona, respondo que no. Esas fueron las afirmaciones que realizó ante fiscalía este 26 de mayo L.R., el sargento segundo de Carabineros y conductor del vehículo lanzagases J-1224, al renunciar a su derecho a guardar silencio en el marco de la investigación por la muerte de dos hinchas de Colo Colo, en la previa de un partido por Copa Libertadores. El uniformado estaba a dos meses de cumplir 18 años de servicio en Carabineros la tarde del 10 de abril pasado. Aquel día, llegó hasta las afueras del estadio Monumental David Arellano para cumplir con labores de orden público. Junto al capitán H... y al cabo segundo M..., fueron designados como jefe de área de un "prefiltro" de acceso por Avenida Marathon, antes de llegar a la calle Benito Rebolledo. Sin embargo, "cerca de las 18:20 horas, aproximadamente, nos encontrábamos detenidos en esa facción junto al vehículo J-1224, cuando escuchamos vía radial que el teniente Baquedano solicitaba cooperación", describió.
