EMOLTV

Espiritualidad alejada de instituciones: Expertos analizan cifras del Censo sobre las creencias en Chile

Académicos descartan que haya una "irreligiosidad" en el país pero apuntan a factores como preferencia por nuevos credos y desconfianza en las iglesias.

02 de Julio de 2025 | 08:00 | Por Sofía Campos, Emol.
imagen
El Mercurio
¿Son los chilenos más religiosos o más ateos? Esta es una de las preguntas que busca responder el Censo de Población y Vivienda 202, el cual reveló que tres de cada cuarto chilenos profesa alguna religión o credo.

Entre los hallazgos se destacó el descenso de católicos en el país, y el aumento de quienes no tienen creencias. Pese a estos factores, expertos descartan que exista una "irreligiosidad" en el país, sino que apuntan a una diversidad de nuevas espiritualidades que son preferidas actualmente por los chilenos.

Según informó el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), del total de personas de 15 años o más, el 74,2% (11.214.961) tienen alguna religión o credo.

La católica se mantiene como la principal religión o credo, con una disminución a lo largo de los años, pasando de 76,9% en 1992, 70% en 2002 y 54% en 2024.

En segundo lugar se encuentra la religión evangélica o protestante, que ha ido en aumento, pasando de 13,2% en 1992, 15,1% en 2002 y 16,3% en 2024.

En contraparte, el 25,8% de la población de 15 años o más declara no tener religión o credo, cifra que era 8,3% en 2002.

Menos religión y más creencias


En concreto, en el cuestionario censal de 2024 se hizo la pregunta "¿cuál es su religión o credo?", la cual tenía 12 posibles respuestas: católica, evangélica o protestante, judía, musulmana, mormón, católica ortodoxa, budista, hinduista, fe Bahá'í, testigo de Jehová, otra religión o credo, y ninguna.

Al respecto, la socióloga, académica e investigadora del Centro de Estudios de la Religión UC, Maureen Neckelmann, explicó que este aumento de personas que no pertenecen a ninguna religión ni credo recae principalmente en que el Censo despliega una serie de opciones y no profundiza en las creencias personales.

"Eso significa que pregunta por si las personas se consideran parte de las religiones que están en la lista. Entonces, aquellos que no se sienten afiliados al catolicismo y al mundo evangélico, que son las dos principales religiones que aparecen mencionadas en la encuesta, lo más probable es que esa persona responda no religiosa o ninguna, y eso es lo que ha aumentado", apuntó la académica UC.

Cabe mencionar que la Encuesta CEP N°92 de agosto y septiembre de 2024 consultó a los participantes en relación a su nivel de acuerdo o desacuerdo con la frase "tengo mi propia forma de conectarme con Dios, sin iglesias ni servicios religiosos".

De ellos, un 74% dijo estar muy de acuerdo o de acuerdo; un 9% ni de acuerdo ni en desacuerdo; un 16% muy en desacuerdo o en desacuerdo; y 1% no sabe o no contesta.

Según sostuvo la socióloga, "esta es una tendencia muy acelerada que ya hemos observado en distintas encuestas en estos años y que yo creo que da cuenta de un proceso muy importante de desafiliación religiosa, que no es lo mismo que el aumento de la increencia o de la irreligiosidad dentro de este grupo de casi 26% de la población".

Y agregó que "hay muchas personas que tienen creencias religiosas que pueden ser muy tradicionales, típicamente en Dios y la Virgen en una cultura como la nuestra, pero también otras creencias que quizás sí son más novedosas porque provienen de otras culturas y tienen una orientación más espiritual".

Por ejemplo, el mismo sondeo del CEP consultó sobre la creencia en diferentes temas como el cielo (73%), la vida después de la muerte (72%), los milagros religiosos (69%), el "mal de ojo" o capacidad de ciertas personas de transmitir maleficios a otras (67%), el infierno (54%) y los poderes sobrenaturales de nuestros antepasados muertos (46%).

Esa misma pregunta evidenció el aumento de quienes creen en la energía espiritual localizada en las montañas, lagos, árboles y cristales de 54% en 2018 a un actual 66%; y de quienes confían en la reencarnación, entendido como el renacer en este mundo una y otra vez, desde un 43% a un 56% en el mismo período.

Esto se demostró también en una encuesta de Pew Research Center revelada en mayo de 2025, que dio cuenta el 60% de los chilenos dice que "hay algo más allá del mundo natural" y un 33% afirmó que objetos pueden tener energías espirituales.

Razones de las bajas religiosas


Por su parte, Cristian Parker, sociólogo experto en temas religiosos y postulante al Premio Nacional de Humanidades y Ciencias Sociales 2025 por el Instituto de Estudios Avanzados (IDEA) de la Usach, mencionó que la disminución de adherentes religiosos se explica por "tres elementos que se desarrollan de manera prácticamente simultánea y correlativa una con otra: el descenso de la adhesión al catolicismo, el incremento de la adhesión a las iglesias evangélicas y el incremento de quienes se declaran no religiosos o no declaran tener ninguna religión".

Y añadió que "hay muchas personas que dicen 'yo no tengo religión'. ¿Por qué? Porque no quieren identificarse con las iglesias y con las religiones tradicionales. Sin embargo, ellos, en su fuera interno y en su vida diaria, tienen formas de búsquedas espirituales, o pseudo-religiosas, o para-religiosas, o cosmovisiones que tienen relación con elementos sobrenaturales".

En esa línea, "hay muchas búsquedas de religión no instituidas y hay mucha gente que se declara 'católico a mi manera', que quiere decir 'yo no quiero recibir instrucciones de una iglesia, yo quiero vivir mi catolicismo en mi propia vida y con mis propios recursos, aunque reconozco ciertos elementos del catolicismo, yo lo vivo de otra manera'".

"Hay muchas personas que dicen 'yo no tengo religión' porque no quieren identificarse con las iglesias y con las religiones tradicionales. Sin embargo, ellos, en su fuera interno y en su vida diaria, tienen formas de búsquedas espirituales.

Cristian Parker, sociólogo experto en temas religiosos de la Usach
La investigadora UC mencionó que en el proceso de desafiliación de una religión o credo "hay una clara tendencia generacional, es decir, los datos muestran que en general son personas jóvenes, lo que habla de un tipo de desafiliación que se da específicamente en ciertas edades y no necesariamente en ciertos grupos socioeconómicos".

"El efecto de la edad es mucho mayor que el efecto de otras variables sociodemográficas como la educación, la clase social, etcétera", mencionó, agregando que el grupo de los "no religiosos" está "bastante concentrado entre los jóvenes, que es algo que también es muy característico de nuestro proceso de cambio religioso", señaló.

A su vez, añadió que "hay una cuestión cultural. Los jóvenes tienden a ser menos religiosos, y esto a nivel global para tener creencias menos institucionales, a formar su identidad de forma mucho más flexible y fuera de los mandatos institucionales".

Desconfianza institucional


A juicio de Neckelmann, los resultados del Censo dan cuenta de que "aquí hay un proceso muy fuerte de desconfianza institucional, que también se expresa en la caída de las confianzas en distintas instituciones, y especialmente en la Iglesia Católica".

"La adhesión al catolicismo se ve afectado, algo que no se observa tanto en estos datos, pero sí en los censos anteriores por un aumento de los evangélicos, por una competencia religiosa que se da especialmente en los sectores populares", puntualizó la académica UC.

En esa línea, afirmó que "lo que está pasando es que las personas pasan del catolicismo a ninguna religión. Esto es, por supuesto, una pérdida en el sentido de afiliación institucional (...) y plantea desafíos pero también creo que llevan a la iglesia a reformular su rol y su misión".

A juicio de la socióloga, "hay un efecto del periodo que atraviesa la Iglesia Católica en nuestro país, muy marcado por las crisis de abusos. Y eso probablemente también repercuta en que las personas, sin necesariamente perder la creencia, dejan de sentirse afiliados a la institución".

En esa misma línea, el profesor de la Usach apuntó que "hay una diversidad creciente de católicos que muchas veces ha sido polarizada y conflictiva, porque en el fondo tampoco ha habido una respuesta adecuada de la iglesia a las demandas de la gente por su anhelo de una vida religiosa, de una fe más encarnada, etcétera".

Según el Doctor en Sociología, esto se debe "por sobre todo por el problema de los abusos sexuales del clero y la corrupción".

¿Irreligiosidad en Chile?


Cabe señalar que Neckelmann subrayó que "la desafiliación o el aumento de la no religión no necesariamente es un síntoma de irreligiosidad o de aumento de la increencia".

Esto, porque en otros sondeos se puede evidenciar que "la creencia en Dios, en la Virgen, en otras divinidades o aspectos sagrados sigue existiendo. Y también afloran ciertas creencias más espirituales, que están menos también condicionadas por una institución".

En ese mismo sentido, Parker agregó que "lo que está creciendo es la diversidad. Hay muchas más formas de creer, desde cuestiones esotéricas, del yoga, de religiones orientales".

11,5%de los censados en 2024 declaró pertenecer a un pueblo indígena u originario.
Además, apuntó que "el Censo no dice ni habla de algo que para nuestra calidad religiosa en Chile es siempre muy relevante. Hay dos millones de personas en este país que se declaran pertenecientes a algún grupo indígena, algún grupo étnico (...) y muchos de ellos también practican sus propias formas de creencia y rituales".

Esto, porque el Censo 2024 reveló que el 11,5% (2.105.863) del total de las personas censadas son o se consideran pertenecientes a algún pueblo indígena u originario.

La mayor proporción corresponde al pueblo Mapuche con 8,8% (1.623.073); seguida por el pueblo Aymara con 1% (178.637) y el pueblo Diaguita con 0,8% (153.231).

Le siguen los pueblos Quechua (0,3%), Atacameño o Lickanantay (0,2%), Colla (0,1%), Chango (0,1%), Rapa Nui (0,04%), Kawésqar (0,01%), Selk’nam (0,01%) y Yagán (0,01%).

"El Censo no toma conocimiento de eso, lo olvida, lo descuida. Si pudiéramos hacer de otra manera el Censo, yo creo que habría una gran cantidad de gente que diría 'sí, yo también hago mis rituales ancestrales', lo que forma parte de la diversidad religiosa que es parte del nuevo panorama que tiene Chile y toda América Latina", cerró Parker.