Desde hace más de dos semanas, los 40 tótems de autoatención ubicados en la entrada y los 34 de la salida del Aeropuerto Arturo Merino Benítez de Santiago se encuentran fuera de servicio.
Según consignó el Diario Financiero, la PDI comunicó que la interrupción se debe a una "actualización programada de la base de datos", que se encuentra actualmente en desarrollo y en una fase técnica.
Según la institución, esta actualización busca
"mejorar el servicio" y permitir que el sistema funcione de manera "óptima", asegurando un "flujo expedito de los ciudadanos chilenos" y el "normal desempeño enfocado a los procesos asociados a la seguridad migratoria".
La PDI no vinculó esta actualización a los problemas previamente identificados por los usuarios. La institución calificó el proceso como una "mantención efectuada de forma permanente".
Los tótems, que comenzaron a operar a inicios de 2024 con el objetivo inicial de agilizar la experiencia de los pasajeros, ya habían sido objeto de numerosas quejas por parte de los usuarios asociadas a las demoras y largas filas a la hora de pasar por el control migratorio.
Desde la industria aérea indicaron al citado medio que el proceso de actualización del software se inició durante la semana del 16 de junio, coincidiendo con las vacaciones de invierno y la temporada alta. La PDI explicó que la "necesidad técnica de esta actualización no podía postergarse", pero aseguró que se planificaron "medidas operativas necesarias para mitigar cualquier impacto en los usuarios", entendiendo el aumento del flujo de pasajeros.
Así, para evitar demoras durante este período de alta demanda, la PDI afirmó que se ha "reforzado el control en las casetas de atención personalizadas", afirmando que tienen el procedimiento "completamente estandarizado" y han desplegado los "recursos necesarios".
Por su parte, el concesionario del aeropuerto, Nuevo Pudahuel, sostuvo que aunque se ha generado una "alta afluencia de pasajeros", especialmente en las llegadas, no se han constatado "grandes demoras".