Las diferencias laborales entre los colegios particulares pagados han ido en aumento en los últimos años, derivando en que varios de estos establecimientos se vayan a huelga, interrumpiendo actividades académicas y generando tensión en establecimientos que comúnmente no estaban asociados a este tipo de movilizaciones. Los costos que involucra la financiación de un proyecto educativo, la compleja situación económica del país y la creciente sindicalización en los recintos aparecen como factores para este tipo de paros. Uno de los primeros colegios en convocar una huelga fue el de Mariano de Schoenstatt de Providencia, que se vio obligado a cerrar anticipadamente su semestre. Ayer, se sumó a las movilizaciones el Colegio Padre Hurtado y Juanita de Los Andes, en Las Condes, luego que se rechazara la última propuesta de contrato colectivo. Este tipo de paralizaciones muestra una inclinación hacia la organización sindical en recintos particulares.