La jueza del 8vo Juzgado de Garantía de Santiago,
Irene Rodríguez, se refirió al escándalo por la liberación de
Osmar Ferrer, el sicario del Tren de Aragua que había quedado en prisión preventiva por el asesinato de José Reyes Ossa, el "Rey de Meiggs".
Justamente la orden de dejarlo libre fue firmada por la magistrada. Ante esto, ella se defendió y aseguró no haber cometido delito.
"Solamente puedo decir que
no hubo ni un dolo, ni una corrupción, ni nada en el Poder Judicial. Es lo único que les puedo decir y me declaro inocente en ese sentido", señaló al canal 24 Horas.
Sobre su actuar, explicó que "yo decidí que ingresaran los tres a prisión preventiva, di las órdenes respectivas. La audiencia está muy clara en lo que hice. Y eso, decreté tres prisiones preventivas, mandé las órdenes de ingreso esa misma tarde a Gendarmería".
Además, sostuvo que "lo demás hay que ver qué es lo que pasó y es objeto de investigación. Pero las tres órdenes de ingreso a Santiago I, después de la audiencia que hice, fueron firmadas por mí y fueron remitidas a Gendarmería. Y Gendarmería se dejó constancia en la victoria de la causa que la Gendarme recibió las tres órdenes de ingreso correspondientes y se las llevó esa noche".