La crisis en torno a la frontera norte volvió a instalarse en el debate a raíz de la fuga del país del sicario del empresario de Meiggs, quien hace dos semanas quedó en libertad, aparentemente, por un error entre el 8° Juzgado de Garantía y Gendarmería, proceso que está en investigación.
Lo concreto es que el sujeto, identificado como Alberto Carlos Mejía Hernández -quien había antes dado el nombre de Osmar Ferrer-, logró salir de Chile dos días después de ser liberado. El 10 de julio tomó un taxi con destino a Iquique, zona a la que llegó el día 11; pernoctó en un hostal y al otro día se fue en bus a Arica. Luego de eso, recurrió a automóviles que hacen viajes informales para llegar a la frontera, al paso Chacalluta.
Conocedores de la indagatoria afirmaron que el sujeto pasó por un costado del paso, sin identificarse, y que incluso podría haber salido con su verdadera identidad, sin problemas, pues hasta ese momento no se conocía que era buscado en todo el país.
El caso ha levantado las alertas en torno a un tema que hace años se viene intentando hacer frente, incluyendo el control de las Fuerzas Armadas, pero que sigue teniendo flancos que continúan sin solución, y que forman parte de las preocupaciones de la ciudadanía como un factor relevante respecto a la crisis de seguridad que enfrenta el país.
El domingo, el ministro de Justicia, Jaime Gajardo, dijo en conversación con 24 Horas que hubo "al menos, negligencia" en dejar en libertad al sicario, lo que motivó la indignación del gobernador de Arica y Parinacota, Diego Paco (RN), quien hizo sus descargos a través de X: "No ministro, esto no es negligencia, es un Estado Fallido. Es el reflejo brutal de cómo estamos enfrentando a las bandas criminales: con fronteras débiles, instituciones superadas y un Gobierno que llega siempre tarde. Así no se gana esta batalla".
Quien también cuestionó lo ocurrido fue el exsenador Felipe Harboe, quien en la misma red social planteó que "el sicario repitió el modus operandi de los asesinos de exteniente Ronald Ojeda al escapar por el norte", y criticó que "nada se corrigió con mala experiencia anterior. Crimen organizado observa y usa la inoperancia en control territorial y vulnerabilidades institucionales. Urge evaluación de escenario y adopción de medidas".
"El complejo Chacalluta está obsoleto"
Este martes, el gobernador profundizó en el estado de la frontera y en la dinámica que implica el proceso de salir del país por el paso Chacalluta. "Para salir del país, atraviesas el complejo nuestro, el de Chacalluta, y llegas al de Santa Rosa (por el lado de Perú), y para retornar, pasas directamente al complejo de Chacalluta para entrar a Chile".
"Entre medio hay un vacío, hay una acumulación de personas (...) entre medio de Chile y Perú se juntan personas todos los días, y al caer la noche, atraviesan de manera irregular, bordeando y caminando la frontera, y así es como logran salir y entrar del país, así de sencillo. ¿Y quién controla en ese sector? Ahí está la policía peruana, que por decirlo de alguna manera, son fáciles de persuadir", afirmó esta mañana en conversación con Radio Universo.
"Todos los días, pasadas las 7 de la noche, entre el complejo Santa Rosa y Chacalluta, se juntan alrededor de unas 120 o 150 personas, esperando el contra turno o persuadir a la institucionalidad para poder atraversarla caminando a oscuras, es cosa de todos los días".
Diego Paco, gobernador de Arica y Parinacota
De acuerdo a la autoridad, el complejo Chacalluta "está obsoleto". Esto, afirmó, porque mantiene la misma infraestructura de hace más de 20 años, por donde pasan más de 6 millones de personas, y "hoy día ya no está acorde a estos tiempos, no tiene inteligencia, ni tecnología, ni supervisión real".
En esa línea, comentó que todavía es posible ver "autos, taxistas, buses, micros, con personas que pasan de manera irregular, y no haciendo los controles, porque cualquiera la puede cruzar y caminar, incluso por la misma frontera".
Asimismo, aseguró que cualquier vehículo que quiera ir a Tacna, "va y no necesariamente es controlado (...) los vehículos llegan y pasan, porque no hay una instrucción para eso; además, el Ejército y las Fuerzas Armadas controlan fuera del complejo fronterizo, no tienen su jurisdicción en ese sector".
El gobernador fue más allá y aseguró que todos los días, pasadas las 7 de la noche, entre el complejo Santa Rosa y Chacalluta, "se juntan alrededor de unas 120 o 150 personas, esperando el contra turno o persuadir a la institucionalidad para poder atravesarla caminando a oscuras, es cosa de todos los días".
Por su parte, el alcalde de Arica, Orlando Vargas (PPD), comentó respecto al caso del sicario y las fronteras que "así como se van de Chile, ingresan cien, mil, dos mil, tres mil, y estamos castigados, porque Arica es el filtro de todo el ingreso del tráfico, de la trata de blancas, de la mosca de la fruta, de todo esto que no nos ayuda y hace crecer la delincuencia".
"Yo le pido al Gobierno de Chile que vea cómo somos capaces de educar a más carabineros, más policías, PDI, y mandarlos a la fronteras, si las fronteras son las que cuidan el ingreso al resto del país. Por lo tanto, como alcalde de Arica, debo decir que estamos hoy día faltos de policías, y no puede hacerse cargo el municipio de la seguridad de la región cuando nuestros guardias no tienen armas, no tienen esposas, y Carabineros sí lo tiene, pero no está saliendo a hacer la prevención que necesita este país", subrayó.
Parlamentarios piden más tecnología y foco en pasos no habilitados
Desde el Parlamento, voces representantes de la zona norte de país insisten en que se requiere mayor tecnología para resguardar la frontera, además de modernizar el paso Chacalluta. En paralelo, apuntan a que se avance en una policía fronteriza de élite, pero también poner el foco, principalmente, en los pasos no habilitados.
El diputado Luis Malla (PL) dijo a Emol que "el principal problema que tenemos en la frontera no son los pasos habilitados como el Chacalluta o el Chungará, que sin duda necesitan atención e inversión en su infraestructura; el gran problema son los pasos no habilitados, ahí necesitamos poner toda la atención, se necesita resguardo permanente. Por eso propuse hace tres años una policía fronteriza de élite, que sea rotativa y que tenga abiertas sus cuentas bancarias para que sean revisadas constantemente", acotó.
"Y por otro lado, se requiere mayor control en las rutas, por eso es urgente que salga del senado infraestructura crítica, ya que, en las rutas que están al alcance de las fronteras es donde se instalan taxis y vehículos que movilizan migrantes irregulares y al crimen organizado como lo hemos visto con el caso del sicario de Meiggs", precisó.
"El problema principal no es el control fronterizo Chacalluta. El problema es que los migrantes entran y salen del país cuando quieren y no lo hacen precisamente por el control fronterizo, sino metros más allá sin control alguno o con un control muy precario".
Diputado Enrique Lee (PRI)
Por su parte, el senador José Miguel Durana (UDI), presidente de la Comisión de Seguridad del Senado, remarcó que el paso de Chacalluta es un punto de ingreso y salida de miles de personas hacia y desde Chile lo que exige los más altos estándares de tecnología y control. "A la luz de los últimos acontecimientos, que han provocado alarma pública, hace necesario revisar los procedimientos y necesidades de infraestructura en Chacalluta que hace años está obsoleta", dijo.
Sin embargo, recordó que en 2024 el Servicio Nacional de Migraciones informó que más de 22 mil 200 personas ingresaron irregularmente por un paso no habilitado hacia Chile, vale decir, un promedio aproximado a más de 60 personas diarias y 1.800 por mes, "por lo que esta situación no es sólo un tema del paso fronterizo sino es un problema de un Estado fallido que no dio el ancho para evitar el ingreso ilegal y la salida de personas peligrosas como el sicario", zanjó.
El diputado Enrique Lee (PRI), por su parte, manifestó que "el problema principal no es el control fronterizo Chacalluta. El problema es que los migrantes entran y salen del país cuando quieren y no lo hacen precisamente por el control fronterizo, sino metros más allá sin control alguno o con un control muy precario".
"Entre esos migrantes que entran y salen por nuestra frontera como Pedro por su casa están mimetizados los miembros del crimen organizado, lo que ha quedado claro a raíz de la salida del sicario del país, es que es por las regiones de Tarapacá y de Arica y Parinacota por donde principalmente entran y salen los criminales. Por lo tanto es en estas regiones donde se deben asentar los esfuerzos para frenar el ingreso clandestino de personas indeseadas", subrayó.