Esta jornada el concejo municipal de San Miguel votará si se aprueba la propuesta impulsada por la alcaldesa Carol Bown (UDI), que busca cambiar el nombre de la actual Avenida Salvador Allende por Salesianos, en una instancia dividida entre cuatro miembros a favor y otros cuatro en contra.
La iniciativa busca reponer el antiguo nombre de la calle a Salesianos, denominación que tuvo hasta 2023, cuando fue cambiada en el marco de la conmemoración de los 50 años del golpe de Estado.
En ese contexto, se ha desatado una pugna que incluye a la alcaldesa, vecinos y el propio concejo municipal, y que será resuelta en una sesión programada para las 15:00 horas de este martes.
Hace una semana la jefa comunal presentó los resultados de una consulta ciudadana realizada a los 702 vecinos de la avenida. De ellos, un 82% se mostró a favor de volver al nombre de Salesianos, un 13% no está de acuerdo y un 5% declaró que le es indiferente.
Por otro lado, el Consejo Comunal de Organizaciones de la Sociedad Civil (COSOC) decidió inclinarse por conservar el nombre del expresidente, con siete votos versus cuatro. Sin embargo, este no cuenta con facultades vinculantes en la votación.
Quién es quién
En el marco del debate por el cambio de nombre de la calle se han registrado tensas sesiones del concejo municipal, donde los miembros han dejado entrever su posición sobre la medida.
Todo indicaría que en la sesión se impondría la opción de cambiar el nombre de la vía a Salesianos, considerando la constitución del concejo.
Quienes votarían a favor del cambio de nombre serían los concejales del mismo sector de Bown, partiendo por su compañera de partido Claudia Rojas (UDI), que obtuvo un 2,73% en las elecciones municipales; el exintendente de Santiago y exalcalde de Lo Barnechea por tres periodos Felipe Guevara (RN), que resultó electo con 4,17% de las preferencias; el exjefe de la comuna Luis Sanhueza (RN), que obtuvo 3,57% y Eva Merino (Republicano), que alcanzó un 4,40%.
Por el otro lado están los que se han manifestado por mantener la calle como Salvador Allende, que serían Viviana Llambias (FA) que fue electa con 6,51% de los votos, Carla Santana (PC) que alcanzó un 2,83% en los comicios, Gabriel Zúñiga (PS) que tuvo 3,08% y el excandidato por la alcaldía y concejal más votado con un 8,01%, Claudio Escobar (IND).
Ante un posible empate, el artículo 72 de la Ley 18.695 Orgánica Constitucional de Municipalidades establece que si hay una segunda o tercera votación con igual resultado, "corresponderá al alcalde el voto dirimente para resolver la materia", por lo que la decisión caería en manos de la propia Carol Bown.
Oficio a Contraloría
La iniciativa impulsada por Bown no ha estado exenta de polémica. Incluso, diputados y concejales oficialistas decidieron presentar un oficio a la Contraloría General de la República en el marco del cambio de denominación de la avenida.
Se trata de los diputados Gael Yeomans (FA), Daniel Melo (PS) y Lorena Pizarro (PC), junto a las concejalas Viviana Llambías y Carla Santana.
Según relataron, el oficio busca investigar si en la consulta ciudadana presentada por la alcaldesa se utilizaron recursos públicos en el estudio.
Además, criticaron que la consulta se realizó solo a algunos vecinos de la comuna.
"Hemos visto que se ha difundido esta encuesta como si hubieran participado todas las y los vecinos de San Miguel, cosa que no es cierta. Participaron solamente 702 personas, lo que representa tan sólo el 0,4% del universo de habitantes de la comuna", cuestionó la concejala Llambias.
Misma línea tomó la concejala Santana, quien en la pasada sesión del concejo afirmó que el sondeo "recoge solo el 0,4% del parecer de los vecinos de la comuna de San Miguel, ya que fue una consulta restringida, escasamente informada y con baja participación. Lo que es una debilidad metodológica".