El diputado independiente de la bancada PPD, Jaime Araya, presentó un proyecto de reforma constitucional que aumentó los ánimos enrarecidos en el oficialismo, en medio de las tensiones por la carrera parlamentaria y presidencial, y que en estas últimas semanas ha tenido como protagonista al Partido Comunista.
La reforma, denominada por algunas voces del Socialismo Democrático como "anti-Jadue", busca impedir que un parlamentario pueda ser reemplazado "a dedo" por su partido, en caso de que dicho parlamentario sea condenado por algún delito.
El texto llamó la atención, considerando que Daniel Jadue es candidato al Distrito 9 y está inscrito por su partido, pese a que está en calidad de acusado por el Ministerio Público por delitos en la causa Farmacias Populares.
El proyecto
El diputado Jaime Araya comentó respecto a la iniciativa de reforma que "cuando un parlamentario es condenado por hechos de corrupción, no puede ser que el partido político que lo representa como candidato se lleve el premio y pueda nombrar a dedo al reemplazante".
Añadió que "este proyecto lo que busca, por ejemplo, es impedir que Lautaro Carmona pudiera designar al reemplazante de Daniel Jadue, en caso de él fuera condenado. O que José Antonio Kast pudiera designar al reemplazante del diputado Mauricio Ojeda".
"Esto es contra del sentido común. La gente ve con indignación cómo los partidos tienen un premio cuando un parlamentario es condenado por hechos de corrupción. Nuestro proyecto de reforma constitucional lo que busca es corregir, cuando un parlamentario es condenado por corrupción, opere un sistema distinto que la designación que hacen los partidos políticos", sostuvo.
El texto en cuestión apunta a que se modifique el artículo 51° de la Constitución Política de la República, cuyo texto Refundido, Coordinado y Sistematizado se contiene en el Decreto 100 del año 2005, en el sentido de incorporar un nuevo inciso quinto, pasando el actual a ser inciso sexto y así sucesivamente, del tenor que se señala a continuación:
"Para los casos en que la vacancia del cargo de diputado o de senador se produzca con ocasión de que quien detente el cargo de parlamentario en ejercicio, resulte condenado por infracción a las leyes que sancionan el tráfico ilícito de estupefacientes y sustancias sicotrópicas; a las leyes que determinan las conductas terroristas y su penalidad; a las leyes que sancionan los delitos de malversación de caudales públicos, fraudes, exacciones ilegales, cohecho en todas sus formas, o respecto de las leyes que sancionan los delitos perpetrados por asociaciones delictivas o criminales, serán reemplazados por el ciudadano que, habiendo integrado la lista electoral o se encuentre dentro del subpacto de quien provoque la vacancia, hubiere resultado electo si a esa lista o subpacto le hubiese correspondido otro cargo. En caso de no ser aplicable la regla anterior, no procederá reemplazo alguno".
Cuestionamientos a la iniciativa
La iniciativa parece tener poco asidero entre parlamentarios, no sólo del oficialismo, sino que también en la oposición. Algunos tildaron la propuesta de "antidemocrática" y otros hicieron notar que se impulsa en pleno proceso electoral.
La diputada PC, Alejandra Placencia, dijo esta mañana a Radio Universo que la iniciativa "es antidemocrática, en el sentido que tenemos una legislación que me parece que es correcta, y cuando, por distintas razones el diputado o diputada en ejercicio pierde su escaño, el partido es dueño de ese escaño, entonces me parece que es el partido el que tiene que definirlo".
"Además, eso puede significar que, por la cifra repartidora, sea alguien de otro subpacto, entonces no me parece que sea justo. Ese escaño fue ganado por un partido, y por a, b o c que se pierda, el partido debe buscar ese reemplazo", subrayó.
El diputado Eric Aedo, de la DC -tienda que está en el pacto oficialista para la parlamentaria-, opinó que "los proyectos de ley no tienen que ser contra una persona en específico. He sido crítico ese tipo de medidas, por ejemplo, he sido crítico del proyecto de ley que han presentado para restringir o eliminar la dieta de los expresidentes de la República, simplemente porque el presidente Boric, siendo joven, fue elegido".
"Me parece que los proyectos de ley que parten orientados a una situación específica, al final terminan dañando la propia institucionalidad democrática", agregó, junto con recordar que "la ley electoral establece cuál es la forma en que un partido reemplaza a alguien que, por ejemplo, quede inhabilitado para seguir en el ejercicio de su cargo, como fuese el tema de Jadue, de ser condenado por la justicia. Yo creo que generar proyectos contra personas específicas no le hace bien al sistema democrático".
En tanto, desde la oposición, también hubo voces que cuestionaron la iniciativa. El diputado Andrés Celis (RN), acusó de intentar modificar la Constitución a raíz de la coyuntura política.
"La propuesta eleva un estándar ético aparente, pero lo hace de manera selectiva y oportunista. Que un independiente la promueva no sorprende, porque se construye sobre la desconfianza hacia los partidos, pero el efecto práctico es castigar la representación democrática de millones de electores. Más que fortalecer la probidad, esta reforma transmite el mensaje de que la Constitución puede usarse como un instrumento de coyuntura política", subrayó.
Desde la UDI, el diputado y jefe de bancada, Henry Leal, comentó que "Daniel Jadue tiene suspendido su derecho a sufragio, lo que corresponde es que el Tricel, lo excluya como candidato, es lo que corresponde porque la ley es explícita. Una persona que tiene sus derechos a su político suspendido no puede optar a un cargo de elección popular".
"Ahora, respecto de una reforma legal para futuro, en Chile se legisla para la generalidad de los casos, no para una persona. Me parece que no corresponde ese tipo de de legislación. Aquí lo que corresponde es aplicar la ley actual, y esa ley establece claramente que una persona que ha sido acusada por una pena aflictiva, se le suspende su derecho a sufragio y es lo que esperamos que el Tricel declare y lo excluya como candidato", subrayó.
En tanto, el diputado Cristián Araya (Republicanos), puso el foco en cuestionar la candidatura de Daniel Jadue. "Lo que está haciendo el PC es una sinvergüenzura. Es evidente que no tienen pudor en llevar como candidato a quien, muy probablemente, termine tras las rejas. Están dispuestos a todo. ¿Se imaginan qué más harían si Jara fuese presidente?", subrayó.
El diputado Andrés Jouanett (Amarillos), comentó por su parte que aun cuando la propuesta podría ser "bienintencionada", pero es "extemporánea". "Más allá de cuál sea mi opinión del exalcalde Jadue, será la justicia la que tendrá que determinar su responsabilidad en los hechos que se le imputan. Pero lo que uno no puede hacer es cambiar las reglas del juego cuando se está jugando el partido. Y por tanto, eso no me parece, desde el punto de vista del principio democrático, respecto de lo que han hecho con la propuesta los parlamentarios Araya y Musante".
Agregó que "uno puede no estar de acuerdo de que el partido nombre a un diputado si es que el diputado electo pierde el escaño, pero no me parece esto de hacer leyes cuando ya estamos incluso en el proceso electoral".