Continúan las maratónicas sesiones de la comisión de Salud del Senado para tramitar el proyecto de muerte asistida o eutanasia. Esta jornada expuso en la instancia el cardenal y arzobispo de Santiago, Fernando Chomali, quien pidió postergar la iniciativa y poner foco en la enseñanza de cuidados paliativos.
La propuesta establece el derecho a optar voluntariamente por recibir asistencia médica para morir en casos de enfermedades graves, terminales e incurables, bajo estrictos requisitos y supervisión profesional.
Esta mañana por medio de un documento de tres páginas titulado "Morir en paz: eutanasia no, cuidados paliativos sí", el arzobispo se manifestó en contra de la propuesta que busca regular la muerte asistida.
El representante de la Iglesia Católica partió su intervención relatando que "en definitiva, que hay partes de este proyecto que hay que repensarlos muy bien, porque la medicina tiene fines específicos. La medicina tiene como vincular, prevenir, acompañar, pero no tienes vocación de terminar con una vida humana ni prolongar una vida humana ni tampoco para abandonar una vida humana, y por lo tanto esto va a implicar cambios en la enseñanza de la medicina para todos los funcionarios de la salud".
Chomali apuntó que la eutanasia "nos guste o no nos guste, es un acto de violencia porque termina con una vida que está viva".
En ese sentido, el arzobispo expresó que "la eutanasia no es un acto médico. (Se plantea) la eliminación deliberada a un ser humano gravemente enfermo para terminar con el sufrimiento pero con la eutanasia no se alivia nada, se termina con un una vida".
Sobre el pilar del proyecto que sería el de "muerte digna", Chomali se mostró en desacuerdo y sostuvo que "morir con dignidad significa tener apoyo psicológico, apoyo psiquiátrico, apoyo familiar, apoyo espiritual".
A juicio del cardenal, se debe poner el énfasis de la iniciativa "en los cuidados paliativos, en aliviar el dolor. Hay que enseñar más a los alumnos de Medicina a aliviar el dolor, pero no a terminar, como dice el proyecto, de una enfermedad, porque eso sería una aberración médica, pedagógica y también cultural".
Sobre la objeción de conciencia de funcionarios de salud, Chomali mencionó que "es un derecho, sin lugar a duda, porque permite ser fiel al principio básico de la medicina de no dañar, pero debiese ser para todo el personal de salud que tiene algún vínculo con esa acción, porque, como vuelvo a insistir, no es un tratamiento, no cura nada. Por lo tanto, aquí hay que ser muy cuidadoso".
Además, cuestionó que en la discusión del proyecto "se habla mucho de compasión, pero la verdad es que no, no es así. Es una compasión hacia nosotros que estamos tan preocupados de nuestras propias cosas que no no tenemos tiempo ni ánimo de cuidar a las personas más desvalidas".
Finalmente, mencionó en la comisión de Salud que "lo que yo pido derechamente en esta en esta reunión es que se postergue este proyecto de ley, que lo digo como ciudadano y tengo el derecho a a hacerlo, y que se realice un un verdadero tratado de cuidados paliativos a nivel universitario y a nivel de los hospitales. Estamos muy, muy al debe en eso".