Tras dos meses varado en la Antártica por volar sin permiso en el Continente Blanco, el influencer y piloto Ethan Guo, finalmente llegará mañana a Punta Arenas para tramitar su salida del país.
Así avisó el Ministerio de Defensa a la Fiscalía Regional de Magallanes.
El piloto de 20 años aterrizó el 28 de junio en la isla Rey Jorge tras 10 meses de travesía que lo llevó a 11 países. Según compartió en sus redes sociales, su objetivo era convertirse en la persona más joven en volar en solitario por siete continentes y recaudar US$1 millón para la investigación y concientización de cáncer infantil.
Guo permaneció cerca de dos meses en la Base Frei de la Fuerza Aérea de Chile esperando resolver el proceso judicial que mantenía en su contra por aterrizar en la Antártica sin permiso.
Esto, luego de que la Fiscalía Regional de Magallanes le abriera una investigación penal en su contra por volar desde Punta Arenas al aeródromo Teniente Marsh sin un plan de vuelo autorizado para ello.
Su caso causó conmoción tanto a nivel local como mundial. Sin embargo, las diligencias fueron suspendidas tras llegar a un acuerdo judicial.
Para ello, se establecieron tres condiciones: Guo deberá donar US$30.000 a la fundación chilena Nuestros Hijos, abandonar el país en un plazo de 30 días y no regresar durante tres años. Tras aprobarse su libertad, se gestionó un cupo para que volviera al continente a bordo del rompehielos Almirante Viel.
Luego del paso de la nave por el Paso Drake, ayer se concluyó su campaña antártica y recaló en Puerto Williams. Se espera que mañana Guo pueda arribar a Punta Arenas para
tramitar su salida del país.
Fuentes del caso explicaron a Emol que Guo deberá demostrar cumplir con las condiciones para que se autorice su salida de Chile. Para ello, deberá realizar trámites en la Fiscalía de Magallanes, con sede en Punta Arenas. Después de eso, puede volver de vuelta a Estados Unidos.
De esta manera, será el Ministerio Público el que continúe siguiendo el caso y asegurándose de que Guo cumpla con su compromiso de abandonar Chile y no volver en un plazo de tres años, según lo acordado.