El triunfo de Rodrigo Paz (Partido Demócrata Cristiano) en las elecciones presidenciales de Bolivia puso fin a 20 años de gobiernos del izquierdista Movimiento al Socialismo (MAS), partido del exmandatario Evo Morales.
Paz, de centroderecha, fue diputado, alcalde y senador, por lo que cuenta con amplia experiencia política. A la vez que viene una familia con historia: Su padre fue el también expresidente Jaime Paz Zamora.
El economista dio la sorpresa en la primera vuelta al pasar primero, pese a estar en los últimos puestos de las encuestas.
El domingo, en tanto, se impuso al expresidente conservador Jorge Quiroga, con el 54,5% de los votos.
Sus posturas sobre Chile
Por su victoria lo felicitó el Presidente Gabriel Boric, así como algunos candidatos presidenciales como Evelyn Matthei y José Antonio Kast, quien plantearon la necesidad de trabajar con el país vecino en varios temas.
Algo que el propio Paz había señalado a fines de agosto a Tele13 Radio: "Yo creo que en Chile hay que retomar relaciones, y lo digo abiertamente porque Evo Morales ya perdió cualquier proceso en La Haya de reivindicar el mar. Eso es irreversible por el ámbito judicial. No es que uno no quisiera, porque la verdad que añoramos el tema del mar. Y el caso de Arce, perdió el debate o la confrontación jurídica con Chile en el tema del Silala, quedó como un 50-50 el río que conecta en frontera con Chile".
A su juicio, "si estos temas están de esa forma jurídicamente, yo creo que hay que dejarnos de ciertas tonterías, entrar al ámbito de un fortalecimiento de relación con Chile, que es real, aunque no esté en papeles diplomáticamente hablando".
De este modo, aseguró que "yo voy a reabrir las relaciones con Chile, voy a reabrir las relaciones con los Estados Unidos, voy a reabrir relaciones con todo aquel que sea un buen socio, para que Bolivia se reactive y la gente tenga empleo, trabajo y una vida digna en la patria".
"Lo del mar es un tema que está, y los chilenos tienen que entender, está en nuestro espíritu. Pero el espíritu también tiene que dar de comer. Y eso significa cambiar las relaciones con Chile y generar una dinámica económica diferente, pero además para luchar con todo contra eso que hay en la frontera de ilegalidad, de contrabando, de narcotráfico, de trata de personas", sostuvo.
Cabe recordar que Bolivia rompió relaciones con Chile en marzo de 1978, debido a la controversia por el acceso al mar.
Según publicó El Mercurio, Paz ha tenido varios acercamientos con Chile, a través de su padre. Él ha visitado varias veces el país y tiene contacto estrecho con el expresidente Eduardo Frei Ruiz-Tagle.
También tienen una relación con la familia Paz el expresidente DC y de la Organización Demócrata Cristiana de América, Juan Carlos Latorre.
Polémica por autos robados
Paz enfrentó una polémica con las autoridades chilena durante la campaña, luego de que propusieran legalizar los autos robados que ingresan a Bolivia, conocidos allí como "autos chutos".
"Parece que fuera un pecado tener un auto chuto en Bolivia, cuando todo el mundo tiene un auto chuto en Bolivia", dijo a un medio de ese país.
Ante las críticas que recibió desde Chile, incluso cuestionó el rol de Carabineros en este tipo de casos: "¿Qué pasa con su policía, los Carabineros? ¿No serán ellos los ladrones, que están robando y poniendo esos productos en Bolivia?".
Ante los cuestionamientos del presidente del Senado, Manuel José Ossandón (RN), Paz le respondió que su propuesta era "contra la corrupción, contra aquellos que roban coches. (Es) más bien para transparentar todos los coches que tenemos en Bolivia, identificar de dónde proceden, de qué manera funcionan, dónde funcionan".
Hoy, el senador José Durana, presidente de la Comisión de Seguridad Pública del Senado, llamó al Presidente electo de Bolivia, a fortalecer la cooperación bilateral con Chile en materia de seguridad fronteriza, especialmente en el combate al contrabando, la inmigración ilegal y el robo de vehículos que afectan gravemente a la zona norte del país.
Respecto a la legalización de autos que propuso, indicó que solo incentiva el crimen organizado y agrava la situación de inseguridad que viven las regiones fronterizas.
