Varias reacciones dejó el "fin" de la trama de casi 11 años en torno al caso SQM, que este miércoles tuvo la lectura de la decisión absolutoria del Tercer Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Santiago, para todos los involucrados, incluyendo a Marco Enríquez-Ominami, Pablo Longueira y Patricio Contesse.
Ahora, resta que la sentencia se comunique a las partes el miércoles 5 de agosto de 2026, a las 13.00 horas.
No obstante aquello, y aún cuando pudiera abrirse una ventana para que la Fiscalía apele, ya para muchos es considerado una "derrota" para el ente persecutor.
Esto, a la luz de los argumentos esgrimidos por la magistrada María Teresa Barrientos, quien durante tres horas revisó cada una de las imputaciones, con duras críticas hacia el actuar del Ministerio Público, que consideró "poco prolijo".
Las principales razones detalladas por la magistrada para que la mayoría de jueces respaldara la absolución, apuntan a principios como el de "incongruencia", y la "vulneración del derecho a ser juzgado dentro de un plazo razonable". Esto, aludiendo a la cantidad de pruebas que se presentaron en la indagatoria y que se extendieron por más de 11 años.
"Como consecuencia de la extensión del proceso penal, una merma evidente en la calidad de las probancias (...) ya que el transcurso de días, semanas, meses y años, afectan la capacidad de memoria de las personas", cuestionando así la presencia de testigos y peritos para referirse a hechos de "hace ocho, 10, 15 y hasta 17 años atrás", dijo la jueza.
Esto, junto con añadir que existiría un "deterioro en la calidad de la prueba", por lo tanto, las sentenciadoras estimaron que "en el presente caso, existe una violación flagrante al derecho a ser juzgado dentro de un plazo razonable que afecta a todos los acusados, siendo la única forma de impedir que se perpetúe, la opción de una decisión absolutoria".
"La mayor derrota en la historia de la reforma procesal"
La indagatoria del caso SQM comenzó en 2015, como arista del caso "Penta". El exfiscal Carlos Gajardo era uno de los persecutores al mando, junto a su par, Pablo Norambuena.
Esta tarde, tras conocerse el veredicto absolutorio del tribunal, Gajardo sostuvo que "el veredicto que absuelve a todos los acusados en el caso SQM es, sin duda, la mayor derrota que ha tenido la Fiscalía en la historia de la reforma procesal penal".
En esa línea, dijo que este "es el punto final de una serie de decisiones que se tomaron, primero, en el Ministerio Público, desarmando el equipo que había iniciado el caso SQM, y en el Servicio de Impuestos Internos (SII), cuando se tomó la decisión, arbitraria, de querellarse contra algunas personas y no hacerlo en contra de otras, en idéntica situación", cuestionó.
"El resultado de hoy en el tribunal, sin duda, marca la dificultad que tiene en Chile de que la ley se aplique igual para todos, porque los hechos que se dieron por acreditados y que la ciudadanía conoce, sin duda, son de enorme gravedad, y son casos nítidos de delincuencia económica que hoy día han terminado absueltos", zanjó.
Por su parte, esta mañana, el exfiscal nacional, Sabas Chahuán, comentó a Radio Universo que "la derivada del caso SQM, del caso Penta, después de que me fui yo, no me gustan en absoluto. Las salidas que hubo son detestables en algunos casos".
"No puedo decir nada... lo que sí puedo decir, es que es un escándalo que se haya demorado más de 11 años en estar en esta instancia, eso es un escándalo, nunca debió haber pasado, es una vergüenza para el sistema, una dilación de justicia, y si los llegan a declarar inocentes, es injusto para los propios imputados, eso no puede pasar", afirmó.
"Un problema grave en el sistema"
Consultados por Emol, expertos también dan cuenta de sus impresiones en torno al fallo absolutorio y los argumentos del tribunal.
Cristian Riego, abogado penalista de la UDP, comenta que "sin duda que hay un problema grave en el sistema con los juicios complejos que se han alargado de modo extremo debido a prácticas ritualistas y falta de gestión del volumen de pruebas. Creo que se requieren ajustes importantes".
"Hay que reconocer que hay delitos y maniobras que son muy complejas de poder investigar y que no necesariamente eso sea una una falencia de la Fiscalía en particular, sino que es una falencia estructural".
Gustavo Beade, abogado penalista U. Austral
Añadió que "sorprende la actitud del tribunal oral en cuanto a ser tan critico con la extensión de la investigación cuando en realidad la demora más escandalosa ha sido la del juicio oral que está bajo su responsabilidad".
Por su parte, Gustavo Beade, abogado penalista de la U. Austral, comenta que "es cierto que el plazo razonable se vence si la investigación dura tantos años, pero también es cierto que hay que considerar que hay casos muy complejos en el ámbito tributario. Me parece que es necesario que, más allá de considerar que se ponderó un plazo razonable, hay casos en donde es más compleja la investigación y que para eso necesitamos tener un Ministerio Público más dotado, con más recursos, más preparado, con más formación".
"Hay que reconocer que hay delitos y maniobras que son muy complejas de poder investigar y que no necesariamente eso sea una una falencia de la Fiscalía en particular, sino que es una falencia estructural", precisó.
En segundo lugar, el experto se detuvo en el cuestionamiento a los testimonios -testigos y peritos- que, de acuerdo al tribunal, al pasar tantos años, no recordaban detalles, lo que afectaba la validez de la prueba.
Beade subrayó que "es cierto que los testimonios pueden ser complejos de analizar porque pasó mucho tiempo, pero eso pasa en muchos lados. Hay muchos otros casos donde también pasan mucho tiempo y los testigos no se acuerdan, pero eso no es un problema, creo que ahí hay como una especie de sobrerreacción".
Con todo, el experto reflexionó que "estas sentencias, que pueden ser técnicamente correctas, si se pierde considerar ciertas particularidades de los casos, también se acercan más a garantizar la impunidad de determinadas conductas. El mensaje que hoy se da para muchas personas es que las personas poderosas que cometen delitos tributarios pueden irse a su casa tranquilamente absueltas en un juicio sin haber pasado por una prisión preventiva, durante el juicio, en libertad, siguiendo con su vida normal".
"Mientras que las personas que cometen los delitos más pequeños y más fáciles de atrapar, enseguida son encerradas, son perseguidas y castigadas sin que haya tanta discusión y tanta complejidad", zanjó.