Una serie de reacciones a favor y en contra generaron los dichos del jefe de la campaña de Evelyn Matthei, Diego Paulsen (RN), quien ayer elevó el tono frente al Gobierno, a cuyos miembros tildó de "atorrantes".
"Le vamos a decir a los chilenos que nosotros somos los que aseguramos derrotar a este mal gobierno, un gobierno de atorrantes que no han sido capaces de entregar soluciones concretas a los chilenos", manifestó ayer Paulsen, gatillando la controversia.
Esto luego de que además acusara al Ejecutivo de intentar posicionar a José Antonio Kast, para que pase a segunda vuelta, ya que sería "menos competitivo" que Matthei. Aquello, explicaría los constantes ataques del Presidente Gabriel Boric, al republicano.
Palabras que tuvieron respuesta inmediata del Gobierno, desde donde el ministro del Interior, Álvaro Elizalde, consideró que "la ofensa no tiene justificación en un debate democrático".
"Es lamentable; lo que uno esperaría es que se discuta en función de las ideas, que haya debate en torno a las propuestas de país, pero no en torno a la descalificación y menos de este tipo. Más allá de la connotación clasista y todo eso, el nivel tan bajo al que se ha llegado", argumentó además la ministra vocera de Gobierno, Camila Vallejo.
Lo que hay detrás
Tras sus declaraciones, desde el comando de la candidata aclaraban que el ex titular de la Cámara usó el término intentado referirse a que en el Ejecutivos eran holgazanes y no en una forma despectiva a su condición.
Así incluso lo hizo ver el presidente de la UDI, Guillermo Ramírez, quien dijo que "yo me imagino que Diego Paulsen se refiere a este gobierno de inoperantes, de personas que no tienen la capacidad para calcular nada, ni los ingresos del país, ni las cuentas de la luz, este es un gobierno de ineptos, creo que esa palabra es más precisa".
La diputada Ximena Ossandón (RN), indicó que Paulsen "en el fondo está representando, y hoy día todo el mundo lo entiende así, la ineficacia, la inoperancia de este gobierno. Y yo he sido muy sincera, yo jamás en la vida me ha tocado hacer territorio con la cantidad de nivel de reclamos que existe hoy día en la gente".
Desde el comando de la ex alcaldesa aclaran que lo dicho por Paulsen fue en el marco de una respuesta a una pregunta que le hicieron y no algo preparado. Y que más allá del concepto de "atorrantes", todos están convencidos que el Gobierno ha sido "inoperante".
Matthei lo respalda y Kast coincide
De hecho, sus palabras fueron respaldas el martes por la propia Matthei, quien este miércoles volvió a dar su apoyo e incluso profundizó en la crítica y refutó la molestia del Gobierno: "La verdad es que les duele. Lo único que quiero decir es que la inmensa mayoría de los chilenos sienten que este gobierno ha sido irresponsable, incapaz e indolente".
Y agregó que "estamos cansados del mal gobierno. Estamos cansados de la intervención del Presidente Boric, que se mete una y otra vez en lo que no le corresponde. Estamos cansados de que el Presidente Boric se la esté jugando porque llegue un determinado candidato a la segunda vuelta, porque saben que es más fácil ganarle a él. Por lo tanto, nosotros vamos a decir todo lo que pensamos de este gobierno".
Sin detenerse en la palabra usada por Paulsen, Kast dijo que en "el fondo compartimos que es un Gobierno fracasado, que nos va a dejar un legado de más homicidios, de más inmigración ilegal, menos vivienda, de más personas que se fallecen esperando (...) Por lo tanto, los que estamos en la oposición a este gobierno coincidimos y respetamos lo que cada uno plantea".
Incluso el presidente del Partido Republicano, Arturo Squella, complementó que "a nosotros quienes estamos de candidatos en la calle, conversando con las personas, lo que escuchamos es bastante más subido de tono que la palabra que él (Paulsen) dijo, refiriéndose a la mala administración que hemos tenido en estos últimos cuatro años".
Sin embargo, los dichos de Paulsen también sumaron reparos en la oposición, desde donde cuestionaron su "coherencia".
Quien también se pronunció sobre el tema fue el candidato del Partido Nacional Libertario, Johannes Kaiser, quien en un acto de campaña en Osorno dijo el martes que "un colega o ex colega los trató de atorrantes, yo creo que los trató hasta con mucho cariño, y ahí andaba quejándose el Gobierno. Y yo me quejo porque el gobierno nunca se queja cuando yo los trato peor, tiene que ser porque no nos quieren dar el escenario".
Pese a ello, Kaiser se mostró hoy crítico de Paulsen afirmando en su cuenta de X que "Chile Vamos no tuvo problemas para pactar hasta la Constitución con el gobierno de atorrantes".
También surgieron voces críticas en republicanos, por ejemplo, el diputado José Carlos Meza, compartió una noticia sobre los dichos de Paulsen y escribió en tono irónico: "Con ustedes, el gobierno de los acuerdos".
En tanto, el vicepresidente de Demócratas, Matías Walker, apuntó en la misma red social, que si bien él apoya a Matthei, no comparte las declaraciones de su jefe de campaña, "ni en la forma, ni en el fondo. Soy de oposición a este gobierno y tengo la convicción que Chile necesita un cambio que asegure gobernabilidad. Para ello no se precisa descalificar a nadie (...) Debemos entre todos mejorar el nivel del debate".
¿Qué opinan los expertos?
Debate que se da, según dicen en la oposición, en medio de las estrategias que han desplegado los abanderados de derecha para aparecer com el "más duro" frente al Gobierno.
Idea que apoya Ricardo Hernández, Coordinador de Política y Sociedad del Instituto Res Publica, quien manifestó a Emol que "a menos de tres semanas de la elección, el principal desafío de las candidaturas de derecha es conquistar un segmento clave del electorado: aquellos votantes que buscan respaldar al bloque que logre posicionarse como la oposición más firme al actual Gobierno".
En este contexto, Hernández cree que "el uso de epítetos, un tono más confrontacional o las críticas directas a la gestión del Presidente Boric, pueden formar parte de una estrategia orientada a consolidar ese liderazgo opositor".
El analista político Germán Silva, precisó que la frase de Paulsen, "hizo recordar la etapa de zigzagueo y contradicciones en el relato de la primera etapa de la campaña de la exalcaldesa. Creo que fue un error no forzado, innecesario, primero porque puso un tono descalificativo innecesario, considerando que la campaña de Evelyn precisamente había marcado distancia con Kast, Kaiser e incluso de Parisi y ME-O".
En segundo lugar, Silva recuerda que esto "viene justo cuando deben también apuntar a atraer gente del mundo de izquierda y la ex Concertación que mal que mal, varios integrantes del Gobierno son parte de esa sensibilidad. Ahora si el uso de calificativo de atorrantes fue una definición consciente y estratégica, me parece que les fue bastante mal, porque igual terminó la propia Matthei involucrada en las explicaciones, por tanto, metida en el problema".
Para Mauricio Morales, académico de la Universidad de Talca, "las palabras de Paulsen no generan impacto electoral significativo, pero sí una discusión política que viene a crispar el ambiente de cara a las próximas elecciones presidenciales. Más que un argumento, lo de Paulsen fue un insulto que denota cierta desesperación del comando. Además, dio espacio para que el Gobierno esgrimiera una respuesta en torno al clasismo que dejan entrever esos dichos, y que tiene cierta línea con las bases de apoyo a Matthei, que se consolidan en los segmentos altos, pero que retroceden, y mucho, en los segmentos bajos".
A su juicio, "puede ser que no pocas personas que hayan interpretado la palabra 'atorrante' como un juicio despectivo de clase, lo que aleja aún más a la candidatura de esos estratos más pobres que le han sido particularmente esquivos. Adicionalmente, el uso de esta terminología no le va a reportar apoyos a Matthei, y si la idea es imitar a Kast, habría que recordar una máxima de la historia política mundial: la gente siempre prefiere el original antes que la copia".
