El jefe de la Unidad Especializada en Crimen Organizado de la Fiscalía Nacional, Ignacio Castillo, entregó un análisis respecto del entorno delictual luego de que 44 gendarmes fueran detenidas por conformar una red de corrupción, que operaba principalmente en el penal Santiago I.
Esto, después de que el Presidente Gabriel Boric anunciara el envío de una reforma constitucional que busca "separar las funciones de seguridad pública de las de reinserción social. Con esta reforma, Gendarmería pasará a ser una institución de seguridad pública dependiente, por tanto, del Ministerio de Seguridad Pública. Las competencias de reinserción quedarán alojadas en el Ministerio de Justicia en una nueva institución a cargo de esta materia", dijo ayer en un punto de prensa.
Castillo dijo en entrevista con Radio Universo que "lo que ayer se reflejó es una situación grave dentro de Gendarmería y en eso hubo unanimidad respecto a las autoridades en términos de que lo que se había evidenciado en la investigación era una situación especialmente compleja".
Sostuvo que, al mirar la experiencia en otros países, "la vinculación de la corrupción con los establecimientos penitenciarios, con las cárceles y con los gendarmes en particular es muy compleja".
El director recordó que luego de que el Ángel Valencia asumiera como fiscal nacional, el "foco carcelario" el que está "en todas las regiones del país" y que contempla tres líneas investigativas: delitos violentos en el interior de recintos carcelarios, corrupción y presos que dirigen ilícitos hacia el exterior del recinto.
Expuso que estos procedimientos implican una advertencia para los funcionarios públicos que estén dispuestos a corromperse: "La idea de transmitirle a los funcionarios públicos que recibir dinero por cualquier cuestión que signifique, dinero o beneficios que no le correspondan en razón del cargo que tienen, es un delito, y nosotros (...) vamos a ser especialmente estrictos".
Consultado sobre la posibilidad de otros funcionarios políticos que hayan cometido corrupción y puedan creer que zafaron del operativo, Castillo aludió a la ley que permite a imputados obtener importantes rebajas a cambio de información en torno a grupos criminales. "En el ámbito investigativo, te permite ampliar tu nivel de conocimiento de organización criminal (...) Esa persona que puede decir 'ah, no me pillaron, me salvé', yo diría, cuidado, porque todavía existe la posibilidad de que lleguemos a ti", comunicó.