Una intensa agenda internacional mantiene estos días el Presidente electo, José Antonio Kast, quien busca establecer relaciones con países vecinos para barajar la idea de establecer un corredor humanitario en la región.
Kast puso el tema sobre la mesa tras conversar por teléfono con el jefe de Estado peruano, José Jerí y asegurar que estaría a favor de un corredor humanitario, ya que "lo que buscamos es coordinarnos para enfrentar estos flagelos y la migración irregular. Perú vive una situación similar y tenemos que unirnos".
En esa línea, sostuvo que "vimos la opción de seguir trabajando en esa dirección" por lo que el líder peruano "evaluando convocar una reunión con más países" para analizar la iniciativa.
"Hay una situación compleja de personas que quieren volver a Venezuela. Eso implica coordinarse para un corredor humanitario. Hay que analizar todas las vías y creo que existe una buena disposición para avanzar en esa materia", afirmó Kast, agregando que "esperamos que Colombia se sume a este tema y, sobre todo, que en Venezuela puedan ingresar las personas (...) Brasil también esperamos que se sume".
Para los países de la región la piedra de tope es Venezuela, dado que es el país que originó la ola migratoria en América del Sur debido a la crisis política, social y humanitaria provocada por el régimen dictatorial de Nicolás Maduro.
Qué es un corredor humanitario
En concreto, los corredores humanitarios surgieron en 1990 durante la guerra de Bosnia, impulsada por las Naciones Unidas para establecer "zonas seguras" para los civiles durante el conflicto.
Estos surgen cuando la población de un país está atrapada en una zona de guerra, especialmente cuando su ciudad o pueblo se encuentra bajo asedio militar.
Para ello, los países vecinos crean un mecanismo para que los suministros y ayuda pueda llegar a la población, en medio de un lapso de tiempo de alto al fuego o fin a las hostilidades. Esto es lo que se llama corredor humanitario.
De acuerdo a la Unicef, para que se establezca el corredor debe cumplirse el principio de neutralidad, ya que "en ningún momento el corredor puede significar un posicionamiento o un beneficio para ninguna de las partes. Esto significa, por ejemplo, que en ningún caso puede haber contraprestación alguna en los diálogos para abrir estos corredores".
Cómo implementarlo en la región
En el caso sudamericano, la idea sería que se unieran Chile, Perú, Ecuador y Colombia para crear una ruta terrestre o aérea -aunque también existen las marítimas- que permita a los migrantes en situación irregular volver de forma segura a sus países.
La idea es evitar que quienes transiten por el corredor humanitario sean objeto de tráfico de personas o que deban pagar a las grupos organizados que cobran por ingresarlos ilegalmente a distintos países. Por ello, su objetivo principal es la seguridad y protección de los migrantes.
Si bien en el pasado en varias ocasiones que países de la región han manifestado disposición a implementar la medida, el gobierno venezolano debe unirse para recibir a sus connacionales, que son la mayoría de los migrantes en los países antes mencionados.
De acuerdo a la Unicef, para que se establezca el corredor debe cumplirse el principio de neutralidad, ya que "en ningún momento el corredor puede significar un posicionamiento o un beneficio para ninguna de las partes. Esto significa, por ejemplo, que en ningún caso puede haber contraprestación alguna en los diálogos para abrir estos corredores".
Esta jornada Kast mantendrá una reunión con el mandatario de ese país, Daniel Noboa, con quien se espera que aborde también la situación migratoria.
Hasta el momento, le faltaría conversar con el presidente de Colombia, Gustavo Petro, cuya relación se mantiene tensa por sus dichos tras el triunfo del republicano en los pasados comicios, lo que le valió el envío de una nota de protesta de parte de la Cancillería de Chile.
Asimismo, no se han anunciado hasta el momento conversaciones con el mandatario brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva.