El modelo S de Tesla en exhibición.
EFE
SANTIAGO.- A menos de dos semanas de que dos expertos en seguridad informática publicaran sus resultados de cómo
lograron hackear un Jeep Cherokee de Fiat Chrysler, aprovechando problemas de seguridad en su sistema de entretenimiento, otro fabricante vio comprometido uno de sus vehículos a través de otros llamados "hackers buenos" que lograron penetrar su sistema: el modelo S de Tesla.
Tesla confirmó a la BBC que ya emitió una actualización del software para sus vehículos, que apunta a reparar las seis vulnerabilidades que utilizaron los hackers para tomar control de sus sistemas de a bordo.
"A través de un sistema de denuncia responsable, un equipo dedicado de seguridad de Tesla trabajó de cerca con la comunidad de investigadores para asegurarse de que continuamos protegiendo nuestros sistemas de vulnerabilidades a través de pruebas exigentes, validando y actualizando nuestras defensas", informó la compañía.
En su experimento, los investigadores Marc Rogers -de la firma de seguridad Cloudflare- y Kevin Mahaffey -de Lookout- consiguieron penetrar el sistema informático del vehículo modelo S y pudieron apagarlo, obligándolo a denetenerse.
Rogers y Mahaffey dieron a conocer los resultados de su investigación durante la conferencia de hackers Def Con, que se está llevando a cabo en Las Vegas.
A diferencia de lo que ocurrió con el caso del Jeep Cherokee, donde los expertos penetraron el sistema utilizando la conexión a internet de la radio del vehículo, acá se requirió acceso físico al vehículo para poder explotar ciertos problemas. En ese sentido, destacaron que el vehículo de Tesla ofrecía buenas barreras de contención para posibles ataques, pese a los problemas que finalmente encontraron.
Una de las ventajas, según los investigadores, es que Tesla puede aplicar parches de actualización "por aire", lo que hace mucho más fácil mantener los vehículos con las más recientes versiones de software. También resaltaron que, cuando lograron apagar el vehículo de forma irregular, el auto no frenó repentinamente, sino que fue bajando la velocidad progresivamente.
Sin embargo, los expertos coincidieron en que Tesla debía esforzarse más en separar los sistemas de control de vehículo, de los que manejan opciones de entretención.
Los fabricantes de automóviles
han comenzado a tomarse en serio los posibles problemas de seguridad que puedan tener sus vehículos luego del caso que afectó a Fiat Chrysler, fabricante que sacó de circulación 1,4 millones de automóviles para realizar las actualizaciones correspondientes.
