Imagen de prensa, capturada en PS5.
Sony
Jugar "Spider-Man: Miles Morales" en la PlayStation 4 es una experiencia interesante, más allá de que el juego es bueno y entretenido en sí: es un título “reducido” y no una verdadera secuela al exitoso “Spider-Man” de 2018, y al mismo tiempo no es la máxima expresión del juego en sí ni su mejor versión, ya que cuenta con una edición para la nueva PlayStation 5, consola que lo tiene como su principal juego de estreno.
Vamos por punto. "Miles Morales" retoma la historia donde el anterior juego de Spider-Man -en sí, una exclusiva para la PS4- termina, con el joven Miles Morales encontrándose con sus nuevos poderes y donde Peter Parker, el tradicional héroe, asume un rol de mentor. Pero no es una secuela en sí, ya que esta trama tampoco es la principal del primer juego, que en sí dejó varios hilos para próximas historias.
El escenario del nuevo juego es el mismo, una muy detallada réplica de Nueva York, pero donde el ambiente cambia un poco: la atención ahora se centra en Harlem, donde la mamá de Miles está en medio de una campaña política, y en la época de Navidad, con cielos nublados, lluvia y nieve. Todo esto se luce más -o debería lucirse más- en la PS5 por sus capacidades técnicas.
En la PS4, donde no está la tecnología "ray tracing" y donde no se puede hacer que el juego corra a 60 cuadros por segundo, la experiencia es muy cercana a la del título original de 2018. La metodología de movimiento, basada en el desplazamiento aéreo de Spider-Man, y el combate se mantienen igual. Lo que cambia son los nuevos poderes que estrena Miles y leves cambios en los movimientos del personaje: cuando salta de una telaraña a otra, Miles parece tener menos control de su cuerpo, que se mueve libremente, como si aún no supiera controlar bien sus poderes. Es un detalle pequeño pero que respalda la trama.
Sin haber probado la versión de PS5, el juego sí muestra las limitaciones de la PS4. Los tiempos de carga son un poco extensos y en ciertos momentos la acción parece perder algunos cuadros, dando la sensación de animaciones poco fluidas. Es poco común y sólo afecta en momentos de demasiada acción, pero sí es notorio.
Fuera de eso, "Spider-Man: Miles Morales" es un muy bienvenido regreso al ambiente del celebrado juego de 2018, con una mecánica muy similar y con una buena historia, que como siempre, hacer chocar la vida de superhéroe del personaje con su familia y amigos.
El juego es más breve que el original (y se presenta más como un spin off que una secuela) e insiste con mover la acción rápidamente. Al terminar una misión ofrece de inmediato el siguiente hito, haciendo que la exploración quede un poco en segundo plano. Pero pese a eso, es una entretenida opción para esta temporada de fin de año y un buen cierre de ciclo para la PS4. Ahora queda ver cómo será en PS5.