Su evolución en el diseño parte del alerce, el raulí y el pino oregón, con muebles muy rústicos, hasta las creaciones más cuidadas y estilizadas –muy modernas- que vende hoy en día.
“Partí con muebles bien rústicos, con hoyos, de madera de demolición –principalmente postes que había en el campo- que era lo que se usaba en esa época. Atrás había quedado la caoba que le gustaba a nuestros padres y abuelos”, explica.
El estilo country fue el de sus inicios para seguir con el lingue, sin marcas, con mejores barnices, más contornos, ya no tan rústico.
-¿Impusiste un estilo?
“Se fue dando. Al principio trabajé el lingue, más torneado, pero muy liso y con puras molduras. Después vino el cambio de maderas, sin la mancha de lo antiguo; combinadas, mejor pulidas.”
-¿Siempre comercializaste en Santiago?
“En la Nueva Costanera y en Alonso de Córdova, ¡yo vi salir este barrio! Te diría que fui de las primeras, con la María Inés Matte, de los cueros”.
-¿Cómo sigue la historia?
“Vienen los muebles sin moldura, sin torno, lisos, no tan oscuro. Después se empieza a cambiar al mueble oscuro, con vidrio, cromado y se va un poco el cuero, el mármol y la piedra rústica que, yo te diría, ahora se ha comenzado a retomar”.
-¿Y el acrílico?
“Tuvimos dos años full cuero y acrílico y me parece que este último va a seguir combinado con acero cromado, con lino”.
-¿Cuál es el estilo hoy?
“Mármol estilo poroso combinado con muebles antiguos y estoy aclarando un poco los muebles, color chocolate, porque se ve elegante. Vamos a ver si podemos sacar más la veta, por eso no tan oscuro. También estoy introduciendo la pátina dorada y plateada en los muebles, con eso vamos a golpear el próximo año.
“Me parece que estoy volviendo como a una de las fases intermedias de mi evolución. Voy a seguir con el cromado y no voy a hacer más fierro pulido”.
-¿Dirías que las lámparas son un poco el sello de la tienda?
“De todas maneras. Hemos innovado en las con vidrio, con cerámica, de acrílico, cromadas, de cuero, con cuentas de colores. Las decoradoras vienen especialmente a buscar las lámparas aquí”.
-¿Cuál dirías que es el concepto de tu diseño en este minuto?
“Mi proyecto es crecer en la tienda, cambiar todos los días; porque, además, te van copiando un poco. Uno está obligado a renovar continuamente, a informarse, a viajar por lo menos tres veces al año”.
-¿A dónde vas a mirar?
“Antes era Buenos Aires, pero ahora ya Chile no tiene nada que envidiarle. En este momento, viajo a Nueva York, Londres, París, Madrid”.
-Entonces Chile está adelante en Sudamérica en diseño.
“Sí y eso es bueno, porque hace que los que estamos desde antes en el negocio nos estresemos por crear nuevas cosas en diseño y decoración.
“¡Sólo hace 10 años no había nada!, yo vi crecer este barrio y mira en lo que se ha convertido. Los chilenos le han tomado el gusto a la decoración, ven revistas, ensayan y les gusta decorar”.
-¿Te sientes top?
“No, me va bien, pero me voy a mi casa y sigo con mi vida común y corriente. Me gusta lo que hago y, como tengo un gran afecto por mi papá, siento que le doy el gusto a él”.
