AMSTERDAM.- Una empresa holandesa del sector de los servicios sexuales de lujo acaba de poner en marcha una curiosa iniciativa para atraer a más clientes: sexo a bordo de un avión, durante un vuelo de cerca de una hora en jet privado.
La empresa responsable de estos servicios "de altos vuelos" es la "Mile High Club", que promete a sus clientes (de momento solo masculinos) un "vuelo inolvidable", informa hoy el periódico holandés "AD".
El paquete, cuyo precio no se ha divulgado, está pensado para que el cliente en cuestión pueda tener sexo en posturas y lugares divertidos en el interior de la cabina.
"Que nadie piense en un Boeing 737 (de unas 150 plazas, para trayectos de media duración). Nuestro jet-sexual es de capacidad media, para unas 50 personas. Todo es muy exclusivo", apunta el propietario de la empresa, Wouter van de Heijden, en declaraciones que reproduce el diario.
Se trata de la primera vez que una empresa del sector de la prostitución de los Países Bajos pone en funcionamiento una iniciativa de este tipo. "No sabemos qué futuro tendrá el ’sexo en vuelo’. Si funciona bien esta prueba, quizás se convierta en una iniciativa empresarial de gran éxito", apunta Van de Heijden.