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Santiago: Viernes 26 de julio del 2024 | Actualizado 20:47
Se encuentra en abundancia en frutas cítricas. La vitamina C es esencial para la producción de colágeno, la reparación de la piel y para mantener fuertes tus dientes y huesos. La vitamina C no sólo te protege contra el efecto dañino del sol, también puede reparar los daños ya existentes y cambiar la forma en que tu piel envejece.
La encuentras en: Ajíes, pimentones, kale, brócoli, papayas, frambuesas, coliflor, piñas, kiwis, mangos, naranjas, limones, pomelos, mandarinas.
El retinol, uno de los pocos tratamientos anti arrugas realmente aprobados por la FDA (Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU.) es una forma de vitamina A, y trabaja al interior de las células, activando receptores que hacen que funcionen como si fueran más jóvenes. Además, detiene la pérdida del colágeno, que es importante para dar una apariencia jóven y elástica a la piel.
La encuentras en: Camotes, kale, mango, damascos, repollo, zanahorias, ají, lechuga, espinaca, sandía.
Cuando se trata de frenar el envejecimiento, tienes que poner especial atención a tus huesos. Especialmente para las mujeres, la pérdida de masa ósea es uno de los efectos más potentes del paso de los años. La vitamina D trabaja junto al calcio para mantener los huesos densos y fuertes.
La encuentras en: Champiñones de todo tipo, tofu, soya, naranjas, avena.
La necesitas si a medida que has envejecido te das cuenta que aparecen moretones en tu piel, entonces necesitas llenarte de vitamina K. Los doctores comentan que una de las principales quejas de las mujeres de 50 años o más es su aparición, especialmente en los brazos. Además, ayuda a mantener el colágeno en tu piel, dejándola firme, reduciendo la aparición de moretones, venas y marcas oscuras.
La encuentras en: Perejil, kale, berros, espinaca, mostaza, rábanos, albahaca, betarragas.
La vitamina E es fundamental, especialmente si la combinas con la C, para mantener las células saludables. Ayuda a combatir el daño de los radicales libres a nivel celular, lo que vuelve menos vulnerable tu organismo. Es uno de los antioxidantes más potentes que existen y ayuda a cuidar la piel de los daños del sol.
La encuentras en: Aceite de maravilla y de soya, nueces y semillas en general.
