"¿Te das cuenta de lo que has hecho?", me preguntó mi mamá el otro día, hablando por teléfono. Contesté que ‘sí’ solo por inercia, ya que en realidad la respuesta era ‘no’. Mi mamá se refería a cómo había cambiado mi vida en 180 grados, y de lo feliz que le hacía eso.
Estar viajando dos meses sola, recorriendo tantos países, es algo que ella ni en sueños imaginaba, pero la hice soñar y vivir más allá de su imaginación.
Así que ella me animó a contar esta experiencia en otro libro, uno que esté lejos de mi historia con la anorexia, que cuente qué ha pasado conmigo durante estos años, después de la publicación del primer libro. Y que relate cómo una podía sanar, volar y hacer de su vida lo que una quisiera, sin límites. Me dijo que siempre hay luz, y que mi vida para ella era el fiel ejemplo.
Sin saberlo me leyó la mente y pensamiento. Creo que estoy más conectada de lo que creía con mi mamá. Ya que ese libro sobre mi pequeña vuelta al mundo ya tiene título, letras y líneas, y muchas páginas esperando salir a luz.
Sí, mi pequeña vuelta al mundo se convirtió en mi ‘comer, rezar y amar’. Y hoy, desde Bali, le añado páginas e historia a esas líneas que no son novela, son cada una de las aventuras que he vivido en estos casi 70 días que están próximos a llegar a su fin. Pero aún no terminan, y por eso aprovecho cada hora, instante y momento. Al fin y al cabo, lo único seguro que tenemos es el presente.
Empecé este viaje hace mucho, y a la vez siento que fue hace nada. Es como si fuera ayer que estaba en el aeropuerto de Bangkok y me topaba con Rodrigo –mi amigo argentino-, quien se convertiría en mi compañero de viaje por casi un mes.
Chiang Mai, Chiang Rai, Bagan, Myanmar, Camboya, Vietnam, India, Singapur… Son tantos los lugares que he recorrido y que me han dado y enseñado mucho.
Me han hecho ver que el mundo es un pañuelo, que el amor es mucho más de lo creemos. Me han hecho reinventarme y amar cada uno de mis rincones; saber que soy imperfecta y bella, así tal cual como soy, con mis defectos y virtudes; que soy fuerte, valiente y a la vez muy sensible, que mi corazón es frágil y vulnerable y que a veces lo expongo demasiado.
Cuando me hablaban de contar mi historia, yo lo hacía sin temor, sin darme cuenta que me hacía daño. Era meterme en todo lo que me había dolido por años, y que ya había quedado atrás. Era revivir algo que no tenía por qué traer al presente si quería avanzar.
Errónea estaba mi teoría de que así ayudaba. No puedo ayudar si no me ayudo a mí primero, y un flaco favor me hacía al atropellarme al contar una y otra vez mi vivencia, sin darme cuenta que ella quería partir. Yo la retenía conmigo. Pero a pocos días de retornar a Chile siento algo distinto. Tengo muchas ganas de regresar, pero no para quedarme, sino para volver a volar. No más anclas.
Quiero ayudar y lo voy a hacer pero no a costa de mi salud emocional. Voy ayudar a que este país tome conciencia. Ya tengo varias reuniones con políticos esperando y la Cámara de Diputados me recibe en abril por un proyecto de ley que, Dios bien sabe, haré que vea la luz.
Pero más allá de eso quiero que se queden con esta parte de mi vivencia: recorrí Asia, sana y en libertad. Comí, recé y amé con la vida y el corazón. Nada de eso hubiera sido posible si no hubiera decidido dejar mis temores atrás y partir con una mochila a conocerme y conocer. Los kilos y calorías no estuvieron jamás en el recuerdo.
La Denisse que se fue no es la misma que vuelve. Un pedacito de mí siempre quedará en Asia. Una mochila de momentos, recuerdos, anécdotas y vivencias viene cargada de sobre equipaje. Y el punto final de mis líneas de mi pequeña vuelta al mundo está por llegar a su fin, con la historia de una ‘backpacker’ que decidió dejar la burbuja y recuerdos de una enfermedad atrás, y permitirse vivir todas las aventuras que espero, pronto puedan leer.
Denisse Fuentes Estrada, Fundadora & Directora Fundación "Pesa Tu Vida" (www.pesatuvida.cl; Facebook: Pesa Tu Vida; Twitter: @PesaTuVida/@D_FUENTESE; Instagram: Pesa Tu Vida/Denisse.fuentes.e); autora de "La Dieta de la Muerte"; Joven Líder 2015; Diplomada Internacional en Coaching Neurolingüístico.
