SANTIAGO.- Las iguanas son consideradas una
amenaza y una
especie invasora en el estado de
Florida (Estados Unidos),
donde se cree arribaron en los años '60 convirtiéndose en un
perjuicio para la fauna, las plantas y los jardines donde suelen cavar sus madrigueras.
Es por esto que la
Comisión de Conservación de Pesca y Vida Silvestre de Florida, ordenó la
exterminación de esta especie mediante un
cuestionado procedimiento: golpearlas en la cabeza.
Hasta el momento se han eliminado cerca de 250 iguanas con este método de aturdimiento y el costo del plan ha sido cercano a los 63 mil dólares (aproximadamente 38 millones de pesos), siendo calificado por algunos expertos como algo "inhumano". En cambio proponen aplicarse un sedante y luego la eutanasia.
Sin embargo, hay quienes postulan que este mecanismo no sería tan malo, y que por el contrario, sería la forma más "humana" de terminar con esta especie.
En este sentido, Jenny Ketterlin, bióloga de la Universidad de Florida, explicó al Florida Sun Sentinel que hay peores formas de terminar con la vida de estos reptiles, tales como "el ahogamiento, la congelación sin anestesia profunda previa y la decapitación, porque el cerebro del reptil puede permanecer activo hasta un minuto después".
Algo parecido postula el gerente de zoología del Buin Zoo, Alberto Duarte, quien enfatiza en que "deberían aplicar un método de eutanasia, el cual debe garantizar que el animal no sufra, sea rápido y que no sea violento para la persona que estaría aplicándolo".
En conversación con Emol, el especialista explica que la iguana no es una especie autóctona de Florida, sino que fue introducida, lo que genera una "competencia" con las especies nativas.
"La iguana va a empezar a competir con los reptiles locales, por espacio, por comida, etc. Si bien estas son vegetarianas y no se van a comer a otras especies (...) las va a empezar a desplazar", concluye Duarte.
