La práctica afecta principalmente a envases de galletas, chocolate, papas fritas y otros "snacks", alimentos congelados y sushi.
Agencias
Hacer envases más pequeños mientras se siguen vendiendo al mismo precio es una práctica a la que recurren las empresas para evitar encarecer sus productos alimentarios en Japón, donde la inflación es casi inexistente pese al costo creciente de materias primas.
Esta tendencia –conocida en el país asiático como "aumento camuflado de precios"– está recibiendo mayor atención de los medios locales y de los ciudadanos en los últimos meses, en el contexto de aumento global de los precios.
La práctica afecta a envases de galletas, chocolate, papas fritas y otros "snacks", alimentos congelados o sushi preparado, entre otros productos alimentarios de consumo frecuente.
Algunos ejemplos son la reducción desde 85 a 80 gramos de las bolsas de papas "chips" de un popular fabricante, previsto para enero; o el recorte de 11,6 gramos a 9,7 de los KitKat Mini aplicado por Nestlé Japón el año pasado. En ambos casos, los fabricantes mantienen sus precios de venta en 148 yenes (1,16 euros) y 120 yenes (0,94 euros), respectivamente.
Barra de chocolate que era rectangular "se está acercando a un cuadrado"
Esta reducción progresiva y en pequeña medida de las raciones permite a las empresas absorber el costo mayor de sus materias primas sin encarecer el precio de venta de sus productos, aunque la práctica genera descontento entre los consumidores nipones, que han creado webs como neage.jp para hacer un seguimiento exhaustivo de esta "inflación encubierta".
"Cambiemos el nombre del producto a 'nitrógeno con papas fritas'", dice el autor de la nota que examina la evolución del gramaje y los precios de las bolsas de Calbee, ironizando sobre el gas que la empresa usa como conservante y para rellenar unas bolsas de las que algunos consumidores se mofan por contener "solo aire". "La bolsa es razonablemente grande, pero cuando la abres las papas solo son un tercio o un cuarto del contenido", señala el redactor.
Los comentarios de los consumidores en internet también se están expandiendo sobre la reducción del tamaño de los KitKat Mini, muy populares en el país asiático. "La imagen que se tiene de KitKat es rectangular, pero ahora se está acercando a un cuadrado", comentan en la mencionada plataforma.
Mientras en Estados Unidos o en Europa se han registrado subidas récord de la inflación y entidades como la Reserva Federal estadounidense o el Banco de Inglaterra comienzan a adaptar sus políticas monetarias al auge de los precios, la situación en Japón es muy distinta. El Banco de Japón prevé un aumento nulo (0,0 %) del índice de precios al consumir (IPC) acumulado en el ejercicio fiscal en curso, que acabará a final de marzo de 2022, mientras que para el próximo año estima que el indicador avanzará un 0,9 %, según sus últimas proyecciones.
