EMOLTV

No tiene vacuna ni tratamiento: Qué es el "virus del camello" que atormenta a la selección de Francia previo a la final del Mundial

Cinco seleccionados franceses han presentado síntomas de esta enfermedad, que fue detectada por primera vez en Arabia Saudita hace diez años.

16 de Diciembre de 2022 | 11:00 | Por N. Ramírez, Emol
imagen

El entrenador galo comentó que algunos jugadores han presentado un "estado febril" y "síntomas de gripe".

EFE
A pocos días de la esperada final del Mundial de Fútbol de Qatar, una de las selecciones protagonistas enfrenta una inesperada situación: Al menos cinco de sus jugadores padecen síntomas de una enfermedad desconocida en occidente, el llamado "virus del camello".

Éstos son Dayot Upamecano y Adrien Rabiot, que ya se perdieron el partido del miércoles pasado ante Marruecos por semifinales; Kingsley Coman, quien está en duda para el decisivo encuentro del domingo ante Argentina; y Raphael Varane e Ibrahima Konaté, que amanecieron este viernes con síntomas.

El entrenador francés, Didier Deschamps, relató que éstos han presentado un "estado febril" y "síntomas de gripe", y atribuyó la situación a que "es temporada de gripe", a que "las temperaturas han descendido en los últimos días" y a que "los jugadores han tenido que hacer un enorme esfuerzo físico y sus sistemas inmunológicos se resienten".

Ante esto, dijo que han tomado precauciones, como entrenar al aire libre e incrementar el uso de alcohol gel, pero "sin volvernos paranoicos".

Dromedarios infectados trasmiten el virus a las personas


El síndrome respiratorio de Oriente Medio –conocido popularmente como "virus del camello"– es una enfermedad respiratoria viral provocada por el coronavirus MERS-CoV, que es diferente al causante del covid-19 (SARS-CoV-2).

Según información de la Organización Mundial de la Salud (OMS), fue detectado por primera vez en Arabia Saudita en el año 2012, y desde entonces se han producido casos en varios países de Oriente Medio, Asia Meridional y África.

La entidad explica que es un virus zoonótico, es decir, que se transmite de los animales a las personas. En este caso, los seres humanos se infectan por el contacto directo o indirecto con dromedarios infectados, aunque aún no se conoce bien la vía de transmisión exacta.

También se trasmite de persona a persona por contacto directo. Sin embargo, a diferencia de la influenza o el resfriado común, el MERS-CoV no parece propagarse fácilmente entre las personas de manera comunitaria.

se han registrado brotes focalizados en centros de salud, pero fuera de esos lugares, no se ha detectado una transmisión sostenida de persona a persona en ningún lugar del mundo.

Aproximadamente, el 80% de los casos de infección en seres humanos han sido notificados por Arabia Saudita. La mayoría han sido consecuencia de un contacto directo o indirecto con dromedarios infectados o con personas infectadas en establecimientos de salud. Hasta la fecha, solo se ha producido un escaso número de casos fuera de Oriente Medio y los afectados son personas que han viajado hace poco a esa zona.

Desde fiebre y tos, hasta insuficiencia respiratoria o renal


En cuanto a los síntomas de los infectados, van desde la ausencia de síntomas (asintomáticos) o síntomas respiratorios leves, hasta enfermedades respiratorias agudas graves y la muerte.

De acuerdo a la OMS, un cuadro típico del MERS incluye fiebre, tos y dificultad respiratoria. También es frecuente que se desarrolle neumonía. Junto a esto, se han notificado síntomas gastrointestinales, como dolor abdominal, náuseas, vómitos y diarrea. Según señala la Clínica Mayo, también pueden verse afectados los riñones y el revestimiento del corazón.

Un cuadro grave de la enfermedad puede implicar una insuficiencia respiratoria que requiere ventilación mecánica o soporte vital en una unidad de cuidados intensivos, así como una insuficiencia renal.

Las personas que están más expuestas a padecer un cuadro grave de la enfermedad son los adultos mayores, personas con sus sistemas inmunes debilitados o con enfermedades crónicas, como cáncer, nefropatías, neumopatías crónicas, enfermedades cardiovasculares, hipertensión arterial y diabetes.

Aproximadamente, el 35% de los casos de pacientes que han sido notificados a la OMS han fallecido, pero la OMS estima que esa cifra podría estar sobreestimando la verdadera tasa de mortalidad de la enfermedad, ya que es muy posible que los actuales sistemas de vigilancia no detecten los casos leves.

No consumir leche o carne cruda de dromedario


Actualmente, no se dispone de ninguna vacuna ni de ningún tratamiento específico contra la infección causada por este virus, por lo que en la práctica el manejo del paciente depende de su estado clínico y se centra en aliviar los síntomas, incluyendo incluye reposo, ingesta de líquidos, analgésicos y, en casos graves, oxigenoterapia.

Como precaución general, se recomienda que las personas que visiten lugares donde hay dromedarios adopten medidas de higiene básicas, como lavarse las manos después de tocar a los animales y evitar el contacto con dromedarios enfermos.

La OMS señala que puede consumirse carne y leche de camello, pero una vez que estos productos hayan sido pasteurizados o cocidos. Jamás ingerirlos crudos o poco cocinados.

No existe la recomendación de no viajar al Oriente Medio u otros lugares donde se haya detectado esta enfermedad, pero si una persona ha estado recientemente en la península arábiga o un país vecino y, dentro de los 14 días posteriores a tu regreso, presentas fiebre y los síntomas descritos anteriormente, debe consultar a un médico.
EL COMENTARISTA OPINA
¿Cómo puedo ser parte del Comentarista Opina?