El Universal México / GDA
Hay muchas formas de expresión artística dependiendo de la persona que lo realice, pero también de quien lo vea. Las distintas concepciones de lo que es y no es arte se toparon en el Museo de Arte Keeum de Seúl, Corea del Sur, en donde un joven se comió un plátano que estaba en la exposición "Nosotros".
Se trata de la obra del italiano Maurizio Cattelan que, con cierta ironía vendió la fruta pegada con cinta americana a una pared por 120.000 dólares. Por segunda vez en la historia de su creación una persona la devoró.
El sujeto se llama
Noh Huyn-soo quien además es un estudiante de arte de Corea del Sur. En el video viralizado se puede ver al joven quitando la obra de la pared y tomándose su tiempo para comérsela, para luego dejar la piel de la fruta de nuevo en su sitio. Durante la grabación también se escucha algo que parecieran advertencias sobre que eso no se puede hacer, pero él continúa.
Luego del hecho, Noh aseguró que actuó conscientemente: "Dañar una obra de arte también podría verse como una obra de arte, pensé que sería interesante... ¿No está pegado allí para comerlo?", mientras que el dueño de la obra dijo que "no hay problema" con lo ocurrido.
La vez anterior que sucedió lo mismo fue cuando el artista de performance, David Datuna, lo hiciera en el Art Basel en Miami.