El Mercurio (imagen referencial)
Las autoridades informaron este martes que hallaron restos humanos dentro de un enorme cocodrilo que atacó el sábado pasado a un hombre mientras estaba pescando en el río Annan, en el noroeste de Australia.
A raíz de este hallazgo forense, las autoridades suspendieron el operativo de búsqueda y rescate emprendido poco después de reportarse que este turista desapareció tras caerse desde un puente a las aguas de este río poblado por cocodrilos, según un comunicado publicado hoy por la Policía del estado de Queensland.
Por su parte, la familia de la víctima emitió un comunicado en el que señaló que la primera era un médico australiano de
40 años llamado Dave Hogbin y que cayó el sábado
desde una pendiente orilla del río Annan. El médico generalista era de Newcastle, en Nueva Gales del Sur, y estaba de vacaciones acampando por Queensland con su esposa Jane Hogbin y sus tres hijos de 2, 5 y 7 años.
El hallazgo de los restos humanos se produjo después de que las autoridades de Queensland informaran el día anterior que sacrificaron a un cocodrilo de 4,9 metros capturado en un riachuelo cerca del lugar del ataque.
El animal tenía cicatrices en el hocico similares a las que los testigos describieron haber visto en un reptil en las proximidades de la desaparición, según las autoridades.
Se cree que los restos humanos hallados en el interior del cocodrilo durante un examen en Cooktown son de Hogbin, según estableció la policía en el texto. Sin embargo, indicó que se realizarán más pruebas para identificar positivamente los restos.
Cabe mencionar que el comunicado de la familia corrigió los reportes policiales que afirmaban que Dave Hogbin estaba pescando al momento de su caída. De acuerdo con su familia, el hombre caminaba por un sendero a cinco metros por encima del río cuando parte de la orilla cedió.
"Esto hizo que Dave cayera al río, y a pesar de ser alto, fuerte y estar en forma, las condiciones del terreno hicieron que Dave fuera incapaz de salir por sí mismo del agua", explicó la misiva.
Segundo ataque mortal en menos de un mes
Es importante señalar, que este incidente se produce a menos de un mes de que las autoridades del Territorio Norte, colindante con Queensland, sacrificaran a un cocodrilo que mató a una niña de 12 años que nadaba en un riachuelo infestado de estos reptiles en la comunidad aborigen Palumpa (Nganmarriyanga), a unos 357 kilómetros al suroeste de la ciudad de Darwin.
Los cocodrilos de estuario (Crocodylus porosus), al igual que los tiburones, son dos temidos animales conocidos por sus esporádicos ataques a humanos, algunos de ellos mortales.
Estos reptiles son depredadores que suelen emboscar a sus presas mientras esperan sigilosa y pacientemente, pasando muchas veces desapercibidos, en la orilla de las aguas de los ríos, lagos, playas y otros ambientes acuáticos del llamado 'País de cocodrilos', que abarca al Territorio Norte y Queensland.
Los cocodrilos de estuario en Australia, unos animales que pueden medir hasta seis metros, abundan en la región tropical del norte australiano después de que fueran declarados una especie protegida en 1971, cuando quedaban unos 3.000 ejemplares silvestres por la caza indiscriminada.
Estas medidas de protección permitieron que la población de cocodrilos de estuario se recuperara en el Territorio Norte hasta alcanzar unos 100.000 ejemplares en la presente década.