AFP / Instagram (captura)
Luego de la caótica
visita de los reyes de España, Felipe VI y Letizia; el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el presidente regional de Valencia, Carlos Mazón, a
Paiporta, el epicentro de las inundaciones que asolaron esa provincia hace casi una semana atrás,
Victoria Federica, la sobrina del monarca, alzó la voz para defender a su tío y criticar al mandatario.
La comitiva llegó ayer al municipio de la Comunidad Valenciana, y fueron recibidos por los habitantes con gritos e insultos en reclamo por la reacción que han tenido las autoridades ante la tragedia que ha dejado al menos 217 muertos y que se ha consagrado como el mayor desastre natural en España en lo que va de siglo.
Los vecinos se mostraron indignados por no haber sido avisados a tiempo de las grandes tormentas del martes y no haber hecho lo suficiente para paliar su sufrimiento, por lo que
incluso lanzaron a las autoridades bolas de barro, palos y otros objetos.
Tras esto,
Victoria Federica, la hija de la infanta Elena, compartió una historia en su cuenta de Instagram para apoyar la visita de su tío a Paiporta y criticar a Pedro Sánchez.
Su publicación
sorprendió ya que, según consignó El Español, la influencer (24) ha intentado mantenerse al margen de las polémicas familiares y, de acuerdo a El Mundo, jamás se había posicionado de forma política.
"
Él (Felipe VI) da la cara cuando los demás huyen. El único servidor público que está siempre donde debe. Yo, con el rey", escribió Victoria sobre una foto del Felipe VI en la Comunidad Valenciana.
En otra imagen, la creadora de contenido que acumula 317 mil seguidores en Instagram, apuntó contra el jefe de Estado español: "
El rey que no tiene poder ejecutivo, se queda a dar la cara. Pedro Sánchez que lo tiene, huye. Y así es como se resume todo.
Un rey que sufre por su pueblo. Y un presidente que lo desprecia".
Lo anterior hace referencia a que en la visita en medio de la tensión, Sánchez fue evacuado,
pero los reyes, con la ropa y el rostro manchados de barro, se quedaron un rato intentando dialogar con la gente, protegidos por sus guardaespaldas que fueron zarandeados constantemente.
Sin embargo,
el que sacó la peor parte fue el propio Sánchez, quien recibió empujones en medio de las protestas e incluso sufrió el impacto de un palo en su espalda. Los vecinos también atacaron uno de los vehículos de la comitiva presidencial, el cual resultó con sus vidrios destrozados.
Por otro lado, y con la cara manchada de barro igual que su abrigo,
el rey Felipe VI siguió avanzando por una de las calles principales de esta localidad de la zona cero del temporal
y trató de tranquilizar a varios de los voluntarios, muy alterados tras cinco días de desastre por la riada.
La reina se mostró visiblemente afectada mientras recorría el municipio y también dialogó con algunos de los indignados, mientras que seguían los gritos de "fuera, fuera" y algunos insultos dirigidos a todas las autoridades.
Aunque en un principio la seguridad comenzó a abrir paraguas para evitar la caída de barro a la comitiva, posteriormente los cerraron mientras que el rey seguía caminando y deteniéndose a hablar con los voluntarios y vecinos alterados.
No obstante, finalmente se retiraron del lugar y cancelaron la visita a otra localidad dañada.