Es común escuchar que
incluir frutas en la dieta es fundamental debido a los
múltiples beneficios que aportan a la salud: son una fuente esencial de vitaminas, minerales, antioxidantes y fibra. Sin embargo, son
muchos los "mitos" que se han instaurado sobre su consumo que apuntan a su
nivel de azúcar, lo que
genera dudas sobre cuál es el mejor momento del día para ingerirlas y las cantidad adecuada de porciones.
Un artículo publicado por la Clínica Universidad de Navarra indica que un hecho muy habitual es que las personas eviten este alimento en la noche como postre,
porque se cree que esto provoca un aumento de peso. Sin embargo, según la publicación, esta creencia es falsa.
Según señaló, en numerosos estudios se ha revelado que comer frutas en ese momento del día puede, de hecho,
prevenir la obesidad y el sobrepeso gracias a su baja densidad calórica, así como su aporte de fibra.
La nota establece que ese mito, lleva a que la
gente elija a la hora del postre otras opciones con peor perfil nutricional, como puede ser un yogur azucarado. Sin embargo, la institución recalca que la fruta es una alternativa mucho más saludable.
Junto con ello, destaca que "para valorar la ganancia o pérdida de peso no se puede atribuir a un solo alimento,
sino considerar la dieta en su conjunto".
Lucía Bultó, experta de la Academia Española de Nutrición y Dietética, coincide con esta teoría y detalla que la causa
detrás del aumento de peso es el conjunto de la alimentación y los hábitos diarios. "Si en la cena se consume una carne frita con papas fritas y una fruta de postre, los alimentos que aportan la mayor cantidad de calorías no son las frutas", grafica.
La nutricionista explica que,
a medida que avanza la tarde, la actividad física suele disminuir y comer en exceso (con alimentos grasos y a una hora tardía) puede
dificultar la digestión, aumentar el riesgo de obesidad y afectar la calidad del sueño. El problema, por lo tanto, no es la fruta, sino la combinación de comidas pesadas.
En ese sentido, recomienda llevar una
dieta balanceada a lo largo del día y adaptarla al nivel de actividad física personal, lo que ayuda a prevenir la obesidad y otros problemas de salud.
El azúcar, un compuesto "intrínseco" de la fruta
Sobre el
azúcar que contiene la fruta, el artículo de la Clínica Universidad de Navarra señala que este compuesto es lo que ha asociado su consumo a efectos negativos.
Sin embargo, se trata de un ingrediente que está "naturalmente presente" y que es "intrínseco" de este alimento, según informa la Organización Mundial de la Salud (OMS).
En específico, estos productos aportan "hidratos de carbono simples, principalmente fructosa, que es un monosacárido".
Debido a que tras la ingesta de alimentos con hidratos de carbono se eleva la glucosa en la sangre, la nota subraya que es "importante aprender a seleccionar los alimentos que aportan la mejor fuente de hidratos de carbono, y priorizar los que tengan un perfil nutricional y de absorción más favorable
como frutas, verduras, cereal integral, legumbre, y lácteos como la leche y el yogur".
¿En qué momento del día consumir fruta?
Si por una parte existe el mito de que comer fruta en la noche aumenta de peso,
también es falsa la idea de que el mejor momento para consumirla es únicamente el desayuno.
La publicación de la Clínica Universidad de Navarra es categórica al señalar que "
la fruta aporta la misma energía, cantidad de agua, fibra, vitaminas, minerales, antioxidantes e hidratos de carbono por la mañana, por la noche, antes de comer o como postre".
"La fruta aporta la misma energía, cantidad de agua, fibra, vitaminas, minerales, antioxidantes e hidratos de carbono por la mañana, por la noche, antes de comer o como postre".
Clínica Universidad de Navarra
En ese sentido, la institución detalla que se sugiere comer
tres porciones de fruta al día como mínimo y que "
se debe animar a consumirla en el momento del día que se desee, respetando gustos y el patrón cultural de cada persona".
Por su parte, en su mismo artículo, Lucía Bultó menciona que
la ingesta de dichos alimentos depende de las necesidades de cada organismo.
Es común que
durante las mañanas el cuerpo haga un mayor esfuerzo físico, por lo que necesita el doble de vitaminas y minerales para afrontar sus diferentes tareas; de tal modo que buscamos fuentes de azúcar para conseguir energía.
3porciones de frutas se sugiere consumir al día como mínimo.
¿Las frutas son la mejor opción para obtener esa estamina?
En realidad sí, es preferible comer una porción de manzana o un tazón de plátano que un pan con chocolate. Pero no sólo obtenemos sus beneficios a la hora del desayuno, ya que también se consiguen al comerlas en cualquier momento del día como postres o snacks.
¿Qué tipo de fruta consumir y en qué formato?
En relación al tipo de fruta que hay que consumir, la nota de la Clínica Universidad de Navarra establece que "
todas son válidas". No obstante, añade que "
siempre es aconsejable priorizar aquellas que están de temporada, porque será
más fácil que tengan un estatus óptimo de vitaminas y minerales".
En cuanto a si ingerirlas como jugo o como unidad, el escrito señala que
siempre es mejor consumirla como "pieza entera", ya que los azúcares "se consideran de manera distinta".
En esa dirección, asegura que en un
jugo "se considera azúcar libre, por lo que se debería limitar su consumo al estar asociado a un mayor riesgo de obesidad, caries, diabetes, etc.".
"Siempre es aconsejable priorizar aquellas que están de temporada, porque será más fácil que tengan un estatus óptimo de vitaminas y minerales".
Clínica Universidad de Navarra
A modo de ejemplo, indica que para hacerse una idea, un vaso de jugo de frutas, "aporta unos 20 gramos de azúcares libres".
Por lo tanto, establece que "un jugo no sustituye a las tres piezas de fruta de consumo diario", no obstante añade que
"una opción intermedia puede ser tomar la fruta batida, como un smoothie, ya que sería mejor alternativa al llevar la pulpa que contribuye a aumentar la saciedad y limitar la velocidad de absorción de los hidratos de carbono respecto al jugo".
Nutrientes de cada fruta
Es importante tener en cuenta que los nutrientes de cada fruta varían. Por ejemplo, los higos contienen 70 calorías por cada 100 g, y son ricos en fibra y antioxidantes; mientras que la sandía aporta 30 calorías por cada 100 g y es ideal para reducir la presión arterial gracias a la citrulina. Para complementar la cena, algunas opciones ligeras son:
-Frutillas (32 calorías por cada 100 g): Ricas en vitamina C; contribuyen a la salud cardiovascular.
-Melón (34 calorías por cada 100 g): Aporta vitaminas A y C; favorece la salud ocular.
-Papaya (39 calorías por cada 100 g): Fuente de fibra dietética; mejora la salud digestiva.
-Durazno (39 calorías por cada 100 g): Alto en fibra dietética; aumenta la sensación de saciedad.