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Caso de mujer embarazada con muerte cerebral genera debate en EE.UU.: Ley prohíbe su desconexión porque el feto moriría

Adriana Smith, de Georgia, tiene 21 semanas de gestación y ya lleva tres meses con soporte vital. Sin embargo, los médicos no pueden retirárselo debido a la "Ley del latido del corazón", que prohíbe el aborto después de que se pueda detectar actividad cardíaca.

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Adriana Smith está internada en el Hospital de la Universidad de Emory y quedan más de tres meses para su fecha de parto.

AP (imagen referencial)
Una compleja situación atraviesa la familia de una mujer de Georgia (Estados Unidos), que fue declarada con muerte cerebral tras una emergencia médica y ha estado con soporte vital durante tres meses, ya que tiene 21 semanas de embarazo, por lo que debido a la estricta ley antiaborto de ese estado, los médicos deben hacer lo necesario para que el feto crezca lo suficiente como para que nazca.

Con su fecha de parto aún a más de tres meses de distancia, podría ser uno de los embarazos más largos de este tipo. Sus cercanos están molestos porque la ley de Georgia, que restringe el aborto una vez que se detecta actividad cardíaca, no permite que los familiares tengan voz en si una mujer embarazada se mantiene con vida gracias al soporte vital.

Adriana Smith, madre y enfermera de 30 años, fue declarada en febrero con muerte cerebral -lo que significa que está legalmente muerta-, según contó su madre, April Newkirk, a la estación de televisión WXIA de Atlanta.

Newkirk dijo que su hija tuvo intensos dolores de cabeza hace más de tres meses y acudió al Hospital Northside de Atlanta, donde recibió medicación y fue dada de alta. A la mañana siguiente, su novio se despertó al escucharla jadear para tomar aire y llamó al número de emergencias 911. El Hospital de la Universidad de Emory determinó que tenía coágulos de sangre en el cerebro y fue declarada con muerte cerebral.

Newkirk dijo que Smith ahora tiene alrededor de cinco meses de gestación. Retirar los tubos de respiración y otros dispositivos de soporte vital, probablemente mataría al feto.

Prohibición del aborto en Georgia


La familia de Smith dice que los médicos de Emory les han dicho que no se les permite detener o retirar los dispositivos que la mantienen respirando, debido a una disposición en la ley estatal que prohíbe el aborto después de que se pueda detectar actividad cardíaca, generalmente alrededor de las 6 semanas de embarazo.

2019 se adoptó la normativa, pero no se aplicó hasta 2022
La llamada "Ley del latido del corazón" de Georgia es una de las leyes más restrictivas sobre el aborto que se han implementado en muchos estados conservadores desde que la Corte Suprema federal anuló el fallo del caso de Roe contra Wade, hace tres años.

La normativa fue adoptada en 2019 pero no se aplicó hasta que la Corte Suprema federal anuló el fallo del caso de Roe contra Wade en 2022, abriendo la puerta a que se implementaran prohibiciones estatales al aborto. Doce estados aplican prohibiciones al aborto en todas las etapas del embarazo y otros tres tienen prohibiciones como la de Georgia, que entran en vigor después de aproximadamente seis semanas.

Al igual que las demás, la prohibición de Georgia incluye una excepción si un aborto es necesario para mantener la vida de la mujer. Esas excepciones han estado en el centro de preguntas jurídicas y políticas, incluyendo un fallo importante de la Corte Suprema de Texas el año pasado que determinó que la prohibición allí se aplica incluso cuando hay complicaciones importantes en el embarazo.

El pronóstico del feto


Los cercanos de Smith, incluido su hijo de 5 años, todavía la visitan en el hospital.

Newkirk dijo a WXIA que los médicos le dijeron a la familia que el feto tiene líquido en el cerebro y que les preocupa su salud.

"Ella está embarazada de mi nieto. Pero puede que sea ciego, quizás no pueda caminar, puede que no sobreviva una vez que nazca", dijo Newkirk, quien no ha comentado si la familia quiere que se le retire el soporte vital a Smith.

"Ella está embarazada de mi nieto. Pero puede que sea ciego, quizás no pueda caminar, puede que no sobreviva una vez que nazca".

April Newkirk, madre de Adriana Smith
La muerte cerebral en el embarazo es rara. Aún más raros son los casos en los que los médicos intentan prolongar el embarazo después de que una mujer es declarada con muerte cerebral.

"Es una situación muy compleja, obviamente, no solo éticamente sino también médicamente", señaló el doctor Vincenzo Berghella, director de medicina materno-fetal en la Universidad Thomas Jefferson de Filadelfia.

Una revisión de 2021 que Berghella coescribió, examinó la literatura médica de décadas atrás en busca de casos en los que los médicos declararon a una mujer con muerte cerebral e intentaron prolongar su embarazo. Encontró 35.

De esos, 27 resultaron en un nacimiento vivo, la mayoría declarados inmediatamente saludables o con pruebas de seguimiento normales. Pero Berghella también advirtió que el caso de Georgia era mucho más difícil porque el embarazo estaba menos avanzado cuando la mujer fue declarada con muerte cerebral. En los 35 casos que estudió, los médicos pudieron prolongar el embarazo un promedio de solo siete semanas antes de que las complicaciones los obligaran a intervenir.

"Es simplemente difícil mantener a la madre fuera de la infección, fuera de la insuficiencia cardíaca", dijo.

Berghella también encontró un caso de Alemania que resultó en un nacimiento vivo cuando la mujer fue declarada con muerte cerebral a las nueve semanas de embarazo, aproximadamente tan avanzado como estaba Smith cuando murió.

Respaldos y críticas


La ley de Georgia confiere personalidad jurídica a un feto. Quienes están a favor de la personalidad jurídica dicen que los óvulos fertilizados, embriones y fetos deben ser considerados personas con los mismos derechos que aquellos que ya han nacido.

"Creo que es completamente apropiado que el hospital haga lo que pueda para salvar la vida del niño".

Ed Setzler, senador republicano
El senador republicano de Georgia, Ed Setzler, que propuso la ley de 2019, dijo que apoyaba la interpretación de Emory.

"Creo que es completamente apropiado que el hospital haga lo que pueda para salvar la vida del niño", dijo. "Pienso que esta es una circunstancia inusual, pero creo que destaca el valor de la vida humana inocente. Opino que el hospital está actuando adecuadamente", agregó.

Asimismo, el senador republicano dijo que los familiares de Smith tienen "buenas opciones", como quedarse con el niño u ofrecerlo en adopción.

Por su parte, organizaciones civiles y congresistas demócratas denunciaron la situación en que se encuentran los parientes de Adriana Smith.

"Esto no es 'promujer', 'provida' o 'profamilia', esto es inhumanidad".

Pronunciamiento del Caucus por la Libertad Reproductiva del Congreso
Por la cruel prohibición del aborto en Georgia, la familia de Adriana Smith está viviendo una pesadilla. Las familias merecen la libertad de hacer sus propias decisiones sobre sus seres queridos", declaró Mini Timmaraju, presidenta de Reproductive Freedom For All.

"La 'Ley del latido del corazón' de Georgia no solo está quitando los derechos reproductivos, también está quitando los derechos básicos de las familias de tomar decisiones médicas por sus seres queridos", comentó la asociación Black Women's Health Imperative en una publicación.

"Esta es la crueldad de las prohibiciones al aborto en su máxima expresión. Esto no es 'promujer', 'provida' o 'profamilia', esto es inhumanidad", manifestó este viernes en un posicionamiento el Caucus por la Libertad Reproductiva del Congreso estadounidense, presidido por las demócratas Diana Degette y Ayanna Pressley.