El Mercurio (imagen referencial)
Las autoridades de la provincia paquistaní de Punjab confiscaron 18 grandes felinos y detuvieron a ocho personas, en una redada a gran escala contra criaderos y propietarios privados, una
operación desencadenada por el reciente ataque de un león "mascota" a una mujer y dos niños.
El incidente que motivó la respuesta de las autoridades ocurrió la semana pasada en la capital provincial, Lahore, cuando
un león saltó el muro de una propiedad. Un video de seguridad, que circuló ampliamente en redes sociales, muestra cómo
el felino ataca a una mujer y dos niños de cinco y siete años, que resultaron heridos.
"En la operación, el departamento confiscó 18 grandes felinos, incluyendo
13 leones, cuatro leopardos y un tigre, en toda la provincia", informó este martes a EFE el subdirector del Departamento de Vida Silvestre y Parques de Punjab, Adnan Ali.
La redada, que abarcó 38 criaderos, sacó a la luz la magnitud de un problema extendido. Según Ali,
se estima que en la provincia de Punjab hay "aproximadamente 600 leones y tigres en casas particulares y granjas de cría".
La tenencia de grandes felinos como mascotas es una conocida y controvertida práctica entre las élites de Pakistán. Heredera de las tradiciones de los antiguos terratenientes feudales, la costumbre se considera una
ostentosa demostración de riqueza y poder.
En los últimos años,
la tendencia se ha visto amplificada por las redes sociales, donde influyentes figuras publican videos con sus leones o tigres en mansiones y coches de lujo.
Las nuevas regulaciones en Pakistán buscan endurecer el control sobre esta práctica, prohibiendo la tenencia de estos animales sin una licencia estricta.
El incumplimiento puede acarrear penas de hasta siete años de cárcel. Las autoridades han anunciado que todas las granjas de cría de la provincia serán inspeccionadas esta semana.