El momento en que Kristin Cabot y Andy Byron se dan cuenta de que fueron enfocados por la "kiss cam".
X (captura)
Cinco meses han pasado desde que
Kristin Cabot y
Andy Byron -en ese entonces jefa de Recursos Humanos y CEO de Astronomer, respectivamente
- fueran captados abrazados y en actitud romántica por la "kiss cam" en un recital de Coldplay en Boston (Estados Unidos). El video del momento rápidamente se hizo viral en redes sociales y el hecho tuvo
consecuencias profundas en la vida tanto laboral como también profesional de sus protagonistas.
Ahora,
por primera vez, Cabot habló públicamente al respecto. En una entrevista con The New York Times, la mujer afirmó que no mantenía una relación sexual con su jefe y que antes de esa noche ni siquiera se habían besado.
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Tomé una mala decisión, me tomé un par de High Noons (cócteles), bailé y actué de forma inapropiada con mi jefe", señaló. "
Tomé una mala decisión. Asumí mi responsabilidad y
renuncié a mi carrera por ello. Ese es el precio que elegí pagar", añadió.
La mujer presentó su renuncia después de que la empresa abriera una investigación y aceptara el retiro de Byron. "Cabot ya no forma parte de Astronomer", dijo una fuente de la compañía en aquel momento al medio TMZ.
"No podía imaginar
cómo podría ser jefa de Recursos Humanos siendo el hazmerreír de la gente", justificó la mujer.
Según explicó, aunque sentía una cercanía a veces romántica con Byron, no se "dejó llevar demasiado" porque era su jefe. El recital de Coldplay llegó justo cuando estaba en proceso de separación de su marido y le pidió a Byron que la acompañara.
Tras un par de cócteles de tequila, ella y su jefe empezaron a parecer una pareja, y se besaron por primera y única vez. Byron bailaba detrás de Cabot cuando ella le tomó las manos y rodeó su cuerpo con los brazos de él. Y entonces llegó el momento la "kiss cam".
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Lo que un instante antes era 'alegría, alegría, alegría' se convirtió en terror", recordó.
"Estaba
tan avergonzada y tan horrorizada (...) Soy la jefa de Recursos Humanos y él es el CEO. Es tan cliché y tan malo", agregó.
Asimismo, afirmó que
luego del momento viral, ambos quedaron en silencio y reflexionaron sin saber qué hacer. "Nos quedamos sentados con la cabeza entre las manos, pensando: '¿Qué acaba de pasar?'", rememoró.
Luego de que el video ocupara los medios de comunicación de todo el mundo, la mujer afirmó que no solo hubo repercusiones a nivel familiar, sino que fue víctima de "doxing" (filtración de datos personales) e incluso fue víctima de unas 50 o 60 amenazas de muerte.
"Quiero que mis hijos sepan que puedes cometer errores, y que realmente puedes equivocarte. Pero no tienes que ser amenazado con morir por ellos", concluyó.