SAN FRANCISCO.- Emanaban tan mal olor que lo primero que uno hacía cuando llegaba a casa era lanzarlos dentro del clóset.
Ahora han salido del clóset y están siendo exhibidos como obras de arte en el Museo de Arte Moderno de San Francisco.
Las que antes se llamaban zapatillas de tenis son ahora parte de una estética atlética en exposición aquí, una exultación de lo último en el raro y maravilloso mundo de este tipo de calzado.
¿Una lujosa bota para bucear? Ya se hizo: un estilizado zapato de goma que cubre la mitad del peroné con el nombre de Gucci en el frente.
¿Una actualización de la zapatilla de taco alto de los años 70? Ya se hizo: por parte de Prada esta vez, en malla metálica con un dedo al descubierto y un taco aguja perfecto para correr por la pasarela.
Luego está el nuevo "Ovidian", de Nike, un zapato convertible que en realidad pueden usar los que buscan dar un toque personal a sus elegantes pies.
"Los zapatos deportivos son la forma más rápida y más fácil de hacer eso. Hay pocas cosas más que sean tan fáciles de cambiar, tan necesarias para usar, y tan fáciles de justificar", dijo Aaron Betsky, curador de arquitectura, diseño y proyectos digitales.
La muestra, titulada "Calzado deportivo 1995-2000", presenta la evolución de la fiel zapatilla hasta convertirse en un ícono de la alta moda. Una cosa es clara: hemos avanzado mucho desde la sencilla zapatilla de tenis de lona.
