BERLIN.- El piloto alemán de Fórmula Uno Michael Schumacher no quiere que su hijo Mick siga sus pasos y prefiere que, si desea tomar alguna de las aficiones del padre, "empiece con un deporte menos peligroso, como el golf".
En una entrevista publicada este viernes por el diario alemán "Kolner Express", el bicampeón del mundo afirma que el pequeño Mick Schumacher, de un año, no tiene por qué ser su sucesor, y afirma que los hijos de famosos encuentran muchos impedimentos si eligen la profesión de sus progenitores.
"Hemos visto este problema en el caso de pilotos como Villeneuve o Hill y otros deportistas que emulan a sus padres y que lo tienen todo mucho más difícil", dijo Schumacher.
El piloto de Ferrari lamenta en la entrevista los inconvenientes de la popularidad y asegura que preferiría "poder moverse sin ser reconocido".