BUENOS AIRES.- El goleador argentino Gabriel Batistuta expresó su deseo de encontrar "una manera de jugar sin dolor, porque si vine acá (a Buenos Aires) es para jugar, no para pasear", en el partido ante Uruguay, el domingo en Buenos Aires.
Sin embargo, Batistuta, de 31 años, no se animó a asegurar su actuación en el partido ante Uruguay: "Hoy no puedo asegurar nada, pero me estoy curando, estoy haciendo todo lo que me ordena el médico para ver si puedo llegar".
Batistuta, que viene padeciendo una rebelde lesión en una rodilla después del partido por eliminatorias ante Colombia, admitió que no está en su mejor momento futbolístico pero explicitó sus ganas de jugar el clásico rioplatense.
Batistuta, que rehuyó sistemáticamente toda referencia al entrenador Daniel Passarella, ahora DT de Uruguay, no arriesgó pronóstico alguno sobre el resultado, aunque advirtió que "Argentina saldrá como siempre, a ganar".
El delantero de la Roma está siendo evaluado por el cuerpo médico del plantel para que el técnico Marcelo Bielsa tenga elementos suficientes para decidir si lo incluirá o no en el clásico del domingo.
El médico Donato Villani tampoco arriesgó un pronóstico sobre la recuperación del centrodelantero pero se reconoció "optimista, porque él tiene muchas ganas, algo que en este tipo de lesiones es muy importante" para acelerar la recuperación.
En los entrenamientos se procura eximir a Batistuta de tener que frenar y girar, que son los movimientos que más perjudican su afección en el tendón rotuliano, para ayudar al proceso de desinflamación.
Argentina, que sufre un tendal de lesionados, formaría el domingo con Germán Burgos; Mauricio Pochettino, Roberto Ayala, Walter Samuel; Nelson Vivas (Claudio Husaín), Diego Simeone, "Kily" González, Pablo Aimar (aún está en duda), Marcelo Gallardo; Batistuta (Julio Cruz) y Claudio López.
