KEY BISCAYNE.- El jugador chileno Marcelo "Chino" Ríos, que debutó con una victoria fácil en Key Biscayne, dijo que pretende continuar sin entrenador aunque lo comparen con el ’Llanero Solitario’.
Ríos superó en su primer partido al estadounidense Mardy Fish con parciales de 6-3, 6-4, y se coló en tercera ronda de este certamen, que otorga puntos para la ATP y WTA, además de premios por valor de 6,3 millones de dólares.
"Realmente no me importa, digan lo que digan pienso seguir solo. Hasta ahora me ha ido muy bien y quiero seguir así un tiempo más", apuntó Ríos, quien alegó que estaba cansado de que le dijeran como hacer las cosas.
El chileno, quien ganó en Miami en 1998, cuando llegó a ser por unas pocas semanas el número uno del mundo, al vencer en la final al norteamericano Andre Agassi con marcadores de 7-5, 6-3 y 6-4, se medirá en tercera ronda con el ruso Yevgeny Kafelnikov, cabeza de serie número tres.
"Sé que es un partido díficil, con Kafelnikov no se sabe nunca como son las cosas. Nos hemos enfrentado en varias ocasiones, hemos ganado y perdido, pero creo que será un gran partido, lo aseguro", pronosticó.
El sudamericano libró su primer escolló con un juego seguro y muy confiado, que hasta cierto punto, demuestra que no le hace falta alguien que le ayude a entrenar.
Ríos, quien tiene una historia bastante controvertida en cuando a disciplina y carácter, dijo que venía a Key Biscayne a recuperar el tiempo perdido y un mejor lugar en el escalafón.
En el año 2001 el chileno terminó en el puesto número 30, aunque ciertamente ha recuperando terreno poco a poco, al punto de ocupar el escaño número 20.
Ríos tiene una foja de servicios bastante atractiva, pues aunque no ha ganado un torneo de Grand Slam, sí se ha coronado en cinco certámenes de Serie Masters; Monte Carlo (1997), Indian Wells (1998), Miami (1998), Roma (1998) y Hamburgo (1999).
"Hace bastante tiempo que fui el número uno", dijo con cierta conformidad Ríos, para agregar luego de pensarlo un poco que "es muy bueno estar entre ellos (los ’top ten’)".
El chileno dice sentirse muy bien jugando en Miami, donde siente mucho calor latino. "Aquí (Miami) se juega como en casa", finalizó.
