RANCAGUA.- Las deudas siguen acosando a O’Higgins de Rancagua y en ese sentido los mismos dirigentes de la institución, encabezados por Francisco Arce, parecen haber cortado por lo sano, pese a haberse puesto la "soga al cuello". Tras una reunión con personeros de la ANFP y el Sifup, se negaron a reintegrar a los jugadores echados (Roberto González, Rodrigo Latorre, José Carrasco y Víctor Arredondo) y volvieron a repactar algunas deudas, firmando un documento que si no cumplen, entrarán en receso.
No obstante, la propuesta deberá ser aceptada por los implicados, lista que también incluye al paramédico del primer equipo, Francisco Zamora, en acuerdo con el plantel para que éste deponga su huelga y el conjunto celeste vuelva a jugar con sus titulares este fin de semana.
Según el portal del Sifup, el compromiso es cancelarles 2 millones de pesos mensuales, a partir de abril y hasta diciembre, es decir 18 millones de pesos. A eso se suma el documento que los mismos dirigentes firmaron, donde se comprometen a pagar el 30 de cada mes y si no lo hacen entrarían en receso, claro que esta vez avalados por la ANFP.
Para Jaime Muñoz, vicepresidente del Sifup, la situación de O’Higgins es caótica: "Nosotros creemos que el club va a terminar entrando en receso, es imposible que siga funcionando así. Los jugadores están con cinco meses de sueldos atrasados y los dirigentes siguen buscando excusas baratas para bajar costos, porque esa es la verdad, a los jugadores se los echa para eso".
